LA PAZ, 18 Sep. (EUROPA PRESS) -
El Gobierno boliviano y los jubilados han acordado iniciar un diálogo para negociar la posible implementación de una paga extra de 3.000 bolivianos (330 euros) que compense sus bajos ingresos, algo a lo que el Ejecutivo se había negado hasta ahora.
El viceministro de Coordinación con los Movimientos Sociales, Alfredo Rada, ha anunciado que el Gobierno ha accedido a recibir a los representantes de los jubilados el próximo 14 de octubre, diez días antes de lo ofrecido en un principio.
"Quiero oficializar que la reunión con el presidente, prevista para el 24 de octubre, se adelanta en los términos que ya habían anunciado el ministro de Economía, Luis Arce, y el ministro de Trabajo, Daniel Santalla", ha dicho en una rueda de prensa.
No obstante, ha criticado "la intransigencia por parte de la dirigencia de los jubilados, que insiste en su demanda del bono de 3.000 bolivianos y de un doble aguinaldo para el sector pasivo, que significan una carga al estado de 90 millones de dólares cada año".
El secretario ejecutivo de la Confederación Nacional de Jubilados del Sistema Integral de Pensiones, Leónidas Cámara, por su parte, ha informado de que han aceptado la oferta del Gobierno, "después de una asamblea de todos los delegados de los diferentes departamentos".
Además, Cámara ha anunciado que los jubilados también han accedido a la petición del Gobierno de suspender la marcha que iniciaron el pasado viernes hacia La Paz desde la localidad de Konani. "Esta aceptación implica nuestro retiro de este movimiento", ha dicho.
Cámara ha alertado de que, a pesar de este acuerdo con el Ejecutivo, no permitirán que ningún partido político se aproveche de su movilización de cara a las elecciones presidenciales del próximo 12 de octubre.
"Nosotros no (nos) vamos a (dejar) politizar ni que nadie nos manosee, hemos decidido aceptar el diálogo y resolver ese tema en ese nivel", ha subrayado, en declaraciones recogidas por la Agencia Boliviana de Información (ABI).