Actualizado 18/03/2008 00:40

Bolivia.- La Iglesia Católica facilita el diálogo entre el Gobierno de Evo Morales y las autonomías departamentales


LA PAZ, 17 Mar. (EUROPA PRESS) -

La Iglesia Católica de Bolivia trata de facilitar el diálogo entre el Gobierno central y las distintas autonomías para que lleguen a un acuerdo sobre el tema de los estatutos autonómicos, objetivo para el que pidió a las partes que cedan en sus posiciones.

El fin de la Iglesia es lograr que se instale un proceso de diálogo político que logre salidas reales a la crisis política del país, según informaron ayer fuentes del Gobierno y de la oposición que añadieron que la Iglesia Católica ha aceptado facilitar ese proceso solo si las partes garantizan que cederán en sus posiciones.

El secretario general de la Conferencia Episcopal de Bolivia (CEB), monseñor Jesús Juárez, dijo el domingo que para que pueda establecerse el diálogo "se necesita un tiempo de preparación para ir pensando en la agenda, en los actores".

"Vamos con mucha cautela porque sabemos que este diálogo no puede fracasar", por eso agregó, en declaraciones a radio Érbol, que han realizado un "fuerte" llamamiento a crear un "clima de apertura renunciando a todas estas actitudes egoístas, visiones parciales o dejando de lado los rechazos, insultos y descalificaciones".

Insistió en que la Iglesia no es mediadora sino facilitadora "para trazar puentes" y establecer las condiciones para que los hermanos se estrechen las manos y despojen todo lo que les separa y para que todos piensen en "el bien del país".

Por su parte, el líder de Unión Nacional (UN), Samuel Doria Medina, afirmó el domingo que la Iglesia irá al diálogo pero "no para fracasar" y añadió que la CEB le ha preguntado al presidente de Bolivia, Evo Morales si va a ser un proceso "en serio" o si se trata de un "diálogo para distraer, para alargar", supuesto en el que la Institución eclesiástica no estaría dispuesta a participar.

En ese sentido, el ex presidente y líder de PODEMOS, Jorge Quiroga, recordó que a su agrupación, ya desde noviembre de 2007, le parece "imperioso" que la Iglesia facilite el diálogo en este conflicto, pero aseguró que entonces "el Gobierno rechazó (la opción) y habló mal de la Iglesia".

"Es preciso avanzar en políticas efectivas de descentralización que otorguen autonomía a las regiones, para un beneficio colectivo mayor y servicios más eficientes, con una normatividad común que garantice la superación de las asimetrías y desigualdades sociales, económicas y políticas", concluyó la Conferencia Episcopal Boliviana en un comunicado.

Por otra parte, la Iglesia estimó que las autonomías "no pueden favorecer solamente a los mismo grupos que siempre han sido los privilegiados", y añadió que en su opinión deben llevar a la construcción de "una nueva y plena unidad de Bolivia" en la que participen los pueblos indígenas y el resto de sectores "hasta ahora" marginados en el país.