LA PAZ, 19 Jul. (Reuters/EP) -
La mayoría de los prefectos regionales opositores al presidente boliviano, Evo Morales, ratificaron que se someterán también al referéndum revocatorio sobre el mandato presidencial, según reportaron medios locales.
La continuidad del mandatario indígena y de ocho de los nueve prefectos será decidida el 10 de agosto en el referendo múltiple que podría romper un llamado "empate político" que ha enfrentado las reformas indigenistas-socialistas de Morales con las autonomías regionales impulsadas por la derecha.
La decisión de los prefectos de los ricos distritos petroleros de Santa Cruz y Tarija y los amazónicos Beni y Pando de concurrir al referendo dejó al de Cochabamba, el ex militar Manfred Reyes Villa, convertido en el único que todavía se niega a aceptar el proceso revocatorio.
"Los cuatro prefectos ratificaron su decisión de participar en la consulta revocatoria de mandato," publicó el sábado el diario 'La Razón' sobre la resolución de autoridades y líderes cívicos opositores que conforman un Consejo Nacional Democrático (CONALDE), reunido el viernes en la ciudad de Sucre.
Los prefectos oficialistas de Oruro y Potosí y el opositor de La Paz anunciaron previamente que se someterán al referendo revocatorio y la novena autoridad regional, la recién electa prefecta de Chuquisaca, no está incluida en el proceso.
El CONALDE, que intentó en vano en las dos últimas semanas modificar las reglas del referendo revocatorio por considerarlas muy favorables a Morales, no mencionó en su resolución de Sucre acciones directas para impedir la consulta.
Tampoco repitió sus recientes denuncias de supuestas irregularidades en el registro de electores, dando aparentemente por válida una aseveración de un enviado de la Organización de Estados Americanos, Eduardo Stein, quien dijo el viernes que no veía riesgo de fraude.
Sin embargo, el CONALDE dejó abierta la posibilidad de conflictos de última hora al amenazar con una huelga de hambre en las regiones a partir del 4 de agosto, seis días antes del referendo, si el Gobierno no atiende su exigencia devolución de recursos utilizados en el pago de una renta universal de vejez.
El CONALDE acordó también iniciar después del 10 de agosto un nuevo movimiento para llevar a referendo su propuesta de traslado del Gobierno nacional a Sucre, en perjuicio de La Paz, bastión electoral de Morales.
"Resolvemos exigir la presidente Evo Morales, como jefe del partido de Gobierno, la convocatoria inmediata a un referéndum nacional para que la voluntad soberana de todo el pueblo boliviano decida la sede de los poderes del Estado boliviano," señaló la resolución publicada por los diarios.
La distribución de recursos entre las regiones y el traslado del Gobierno han provocado en el último año duros enfrentamientos entre Morales y la oposición conservadora, sumados al conflicto entre las autonomías regionales y el cambio de Constitución que pretende el mandatario indígena.
Morales, quien completará la próxima semana la mitad de su mandato, será el primer gobernante boliviano que se someterá a referendo revocatorio, pese a ser el que llegó al poder con el mayor respaldo electoral, casi 54 por ciento, en el último cuarto de siglo.
El mandatario, amigo del líder venezolano Hugo Chávez y el presidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva, inició un proceso de nacionalización de la economía y de incorporación de las mayorías indígenas a la vida política, prometiendo una "refundación" de Bolivia que la derecha ha frenado por ahora.