LA PAZ, 29 Dic. (EUROPA PRESS) -
El presidente boliviano, Evo Morales, se felicitó ayer viernes de que los prefectos opositores hayan recapacitado y aceptado la oferta de diálogo del Gobierno, y les prometió recibirles como éstos han solicitdo el próximo 7 de enero en La Paz, subrayando que el diálogo debe plantearse con "una agenda abierta y sin condiciones".
"Saludo la recapacitación de los prefectos por aceptar al diálogo", señaló Morales, después de que un día antes los prefectos de los cinco departamentos controlados por la oposición se ofrecieran a mantener un encuentro con el presidente el 7 de enero con la condición de que en éste se abordaran cuatro puntos concretos.
"Quiero decirles que en La Paz los esperaré el día 7 de enero del próximo año", añadió Morales desde Cochabamba, donde ayer se reunió con su equipo de ministros y demás colaboradores para evaluar los 23 meses de gestión gubernamental.
El presidente dijo que de producirse finalmente el encuentro después de haber invitado al diálogo en tres ocasiones a los prefectos opositores, en él se deben buscar soluciones a los problemas sociales, políticos y económicos de todos los sectores del país, según informa la agencia oficial ABI.
En ese sentido, Morales convocó a los prefectos a sumarse a este proceso de cambio basado en una revolución social, democrática, pacífica y cultural y reafirmó que el diálogo es el mejor camino para superar los problemas y las diferencias.
Los prefectos de Santa Cruz, Rubén Costas; Cochabamba, Manfred Reyes Villa; Tarija, Mario Cossío; Beni, Ernesto Suárez, y Pando, Leopoldo Fernández, aglutinados en el Consejo Nacional Democrático (Conalde) aceptaron el jueves el diálogo convocado por el Presidente para el lunes 7 de diciembre a las 10:00, en el lugar que definiera el mandatario.
Los cinco prefectos plantearon además una agenda de cuatro puntos: la redistribución de los recursos del Impuesto Directo a los Hidrocarburos (IDH), el mandato vinculante de las autonomías, la nueva Constitución Política del Estado aprobada por la Asamblea Constituyente sin la participación de la oposición y un cuarto para otros temas que disponga el Gobierno. No obstante, el prefecto de Santa Cruz, Rubén Costas, dejó claro "que concertación no significa ir a ceder".
Al respecto, Morales señaló que las "autoridades juramos para hacer cumplir las leyes que son aprobadas por el Congreso de la República". En ese sentido, subrayó que un diálogo no debe estar condicionado y debe ser entendido como fue planteado desde un principio con "una agenda abierta y sin condiciones".