LA PAZ, 21 Dic. (EUROPA PRESS) -
La ONG danesa IBIS ha expresado su "sorpresa" por la decisión del Gobierno de Evo Morales de expulsarla de Bolivia por injerencia política y ha adelantado que intentará dialogar con el Ejecutivo "para aclarar los malos entendidos".
"IBIS está muy sorprendida por el anuncio referido en los medios de comunicación de que será expulsada de Bolivia", ha dicho en un comunicado publicado este sábado.
La ONG danesa ha explicado que "está intentando conocer qué ha motivado este anuncio por parte del Gobierno" y ha indicado que "busca entablar un diálogo para aclarar los malos entendidos".
Además, ha recordado que "tiene una cooperación estrecha con el Ministerio de Educación, el Ministerio de Autonomías y el Ministerio de Relaciones Exteriores", subrayando que han llegado a "alabar su apoyo a la educación intercultural bilingüe".
Asimismo, ha destacado que "el presidente boliviano, Evo Morales, incluso estuvo en Dinamarca en 1995 por invitación de IBIS, durante el Foro Social".
Ayer, el ministro de la Presidencia, Juan Ramón Quintana, anunció que el Gobierno ha decidido expulsar a IBIS de Bolivia porque "ha abusado de su hospitalidad al financiar acciones destinadas a la división de organizaciones sociales".
Quintana explicó que "el Gobierno se ha cansado de tolerar la injerencia política de IBIS en Bolivia". "Nos hemos cansado de tolerar que promueva el conflicto interno en las organizaciones sociales e indígenas", insistió.
También advirtió a las ONG extranjeras que pretendan interferir en la vida política del país andino de que "correrán la misma suerte". "Así, como IBIS, se van a ir otras que hayan distorsionado su tarea", aseveró.
IBIS
Según informa en su página web, "IBIS es una ONG nacida de la organización de la sociedad civil danesa, que trabaja a nivel global, nacional y local para alcanzar acceso igualitario a la educación y los recursos para hombres y mujeres en África y América Latina".
"Realizamos nuestra labor en cooperación con organizaciones populares y de base principalmente en América Latina, además de con autoridades y gobiernos nacionales y locales en África", ha explicado.
Su sede está en Dinamarca, aunque también tiene oficinas en Bolivia, Guatemala, Nicaragua, Ghana, Liberia, Mozambique, Sierra Leona y Sudán del Sur.
En Bolivia tiene su oficina en La Paz, que "coordina y desarrolla actividades en todo el país, apoyando a los pueblos indígenas para el reconocimiento y ejercicio de sus derechos colectivos".