Actualizado 03/05/2008 23:10

Bolivia.- La oposición boliviana arremete contra Morales en la víspera del referéndum autonomista


SANTA CRUZ, 3 May. (Reuters/EP) -

La oposición boliviana redobló hoy sus ataques contra el presidente Evo Morales acusándolo de totalitario y de llevar al país a la desintegración, precisamente el día anterior a la fecha prevista para el referéndum sobre la autonomía del departamento de Santa Cruz, el más rico y cabeza visible de la oposición a Morales.

Santa Cruz, enclavada en la fértil llanura en el oriente de Bolivia, previsiblemente aprobará mañana un estatuto por el que se autoatribuirá competencias hasta ahora reservadas a la administración central en materias como educación, seguridad, justicia y economía, en claro desafío al plan del Gobierno de "refundar" el país con una nueva Constitución socialista.

"Si el Gobierno no cambia su rumbo, cada vez vamos a tener un Gobierno más aislado, más encerrado en sí mismo", declaró a la prensa el presidente del Senado, el opositor Óscar Ortiz Antelo. "Si el presidente no acepta la fortaleza que tienen la demanda de las autonomías departamentales (...) va a pasar que el estado boliviano se va fracturando y fragmentando", agregó.

Mientras, el prefecto de Santa Cruz, Rubén Costas, uno de los líderes del proyecto autonomista, pidió a Morales que impulse un pacto nacional para reformar la Constitución, la cual da más poder a la mayoría indígena y otorga marco legal a la política oficial de nacionalización de los recursos naturales. "Mañana (domingo) es parte de una refundación de lo que llamamos una nueva Bolivia", expresó Costas, quien afirmó que el Gobierno buscar implantar una suerte de "comunismo" económico en el país.

Hoy los camiones custodiados por agentes de la guardia municipal cruceña, una fuerza de seguridad urbana que carece de armas, a diferencia de la Policía Nacional, controlada por La Paz, repartieron las urnas en los centros de votación sin que se registraran incidentes pese a las amenazas de seguidores de Morales de boicotear la consulta.

En las calles de la capital del distrito homónimo apenas se veían algunos pocos carteles pidiendo el "sí" a la autonomía mientras los residentes seguían con su actividad cotidiana. La Corte Departamental Electoral, que se enfrentó con la justicia nacional por dar su aval al referendo, amaneció custodiada por la policía antimotines, una imagen que desentonaba en una ciudad en la que no se podía sentir el típico ambiente preelectoral.