Actualizado 05/07/2008 01:13

Bolivia.- Los prefectos opositores bolivianos aceptan el referéndum revocatorio impulsado por Morales

LA PAZ (Reuters/EP)

Los poderosos prefectos opositores en Bolivia aceptaron hoy someterse a un referéndum revocatorio, levantando su boicot sobre una consulta que podría poner fin tanto a sus mandatos como al del presidente Evo Morales.

Con el referéndum, previsto para el 10 de agosto, el Gobierno busca capear una fuerte crisis política en el empobrecido país, dividido entre quienes respaldan una nueva Constitución que da marco legal al programa oficial de nacionalización económica y los sectores más ricos que la rechazan.

"Vamos a ir a ese referéndum revocatorio de la imposición y del capricho del presidente de la república por la responsabilidad que tenemos con nuestros pueblos para que siga ganando la autonomía", dijo a la prensa el prefecto de Santa Cruz -- el departamento más rico del país--, Rubén Costas.

Los departamentos opositores, ubicados en la fértil llanura oriental boliviana, respondieron al desafío lanzado por el Gobierno de consultar a la población sobre un proyecto de Constitución socialista iniciando procesos para obtener la autonomía en sus distritos.

Costas hablaba en nombre de cuatro prefectos de oposición, reunidos en el denominado Consejo Nacional Democrático (Conalde), quienes habían rechazado someterse a la consulta porque consideran que no resuelve la crisis política en el país y aseguran que sus reglas favorecen a Morales.

Las normas del referéndum determinan que el presidente sería relevado de su cargo si los votos por el "No" superan en número y porcentaje a aquellos con los que ganó en los comicios del 2005.

Por tanto, para revocar a Morales sería necesario alrededor de un 54 por ciento de votos en contra, una cifra difícil de alcanzar dada su popularidad.

En cambio, para revocar a prefectos como el de La Paz, bastaría con alrededor del 38 por ciento de votos en su contra.

Morales, que espera que el revocatorio reste poder a los prefectos de los distritos opositores, ha vaticinado que ganará el referéndum por lo menos con un 60 por ciento de apoyo y advirtió que quienes buscan "sacar del poder al indio" fracasarán.