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MADRID, 30 Ene. (EUROPA PRESS) -
La Comisión de Ética Pública de la Presidencia de la República de Brasil, decidió no investigar el pernocte no programado de la presidenta Dilma Rousseff en Lisboa, el último fin de semana, cuando iba de Davos (Suiza) a La Habana para asistir a la II Cumbre de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC), en Cuba.
El órgano es responsable de revisar las normas de conducta ética y la elaboración del Código de Conducta de las Autoridades del Poder Ejecutivo, siendo un órgano de asesoramiento y no de investigación, por lo que han decidido que no es de su competencia investigar la conducta ética del presidente o vicepresidente, publica la Agencia Brasil.
Este miércoles el Partido de la Social Democracia Brasileña (PSDB) había solicitado una investigación y provocado que la comisión se manifestase a respecto del viaje inesperado de la presidenta a Portugal.
De acuerdo con una publicación del periódico brasileño 'O Estado de Sao Paulo' el grupo que acompañaba a Rousseff ocupó más de 30 habitaciones en dos hoteles de los más caros de Lisboa.
La Secretaria de Comunicación Social de la Presidencia explicó que la escala técnica era obligatoria.
DECLARACIONES
Este miércoles la presidente habló por primera vez sobre el tema y declaró que "yo puedo elegir el restaurante que sea mientras que yo pague la cuenta".
Toda la polémica del viaje se centra, además de la parada no prevista en Lisboa, en el hecho de que la presidenta haya ido al restaurante 'Eleven' en compañía del embajador de Brasil en Portugal, Mário Vilava, y de la ministra de la Secretaría de Comunicación Social, Helena Chagas.
Cuestionada sobre la utilización de la tarjeta de crédito corporativa, la mandataria explicó que "no existe la menor condición de utilizar alguna vez la tarjeta de crédito corporativa" y completó diciendo que "considero que es oportuno que yo de el ejemplo de lo que es consumo privado, de lo que es consumo público", tal como publica el portal G1.