Actualizado 03/07/2015 22:54

Un hombre armado toma como rehén a un trabajador de un hotel en Brasilia

Secuestrador en el hotel Saint Peter
REUTERS

BRASILIA, 29 Sep. (Notimérica/EP) -

Un trabajador del hotel Saint Peter, en Brasilia, ha sido tomado como rehén este lunes por un hombre armado con una pistola que afirma tener material explosivo y los huéspedes y trabajadores del alojamiento han sido obligados a abandonar el edificio por las autoridades.

El secuestrador ha colocado a su víctima un chaleco que supuestamente contiene explosivos y ha salido varias veces al balcón de la habitación número 13 del hotel, donde lo tiene retenido, amenazando con detonarlos. La Policía Civil no está segura de si los explosivos son auténticos, pero ha informado de que el arma sí es real.

"Si fuera material explosivo, tendría una gran capacidad de destrucción. Ocasionaría un enorme daño en la planta y los pisos cercanos", ha señalado el director de comunicación de la Policía Civil, Paulo Henrique Almeida.

Tres negociadores conversan con el secuestrador, que no tiene una reivindicación clara y hace varias referencias a cuestiones políticas de Brasil como la aplicación de la 'Hoja Limpia', que impide la candidatura a los políticos condenados por la Justicia, o el caso Cesare Batisti, un italiano acusado de asesinato en Italia que consiguió autorización para permanecer en Brasil.

Según el relato inicial de los trabajadores, el secuestrador se hospedó el lunes por la mañana en el hotel y reservó dos habitaciones, una enfrente de la otra.

Los huéspedes y los trabajadores del hotel fueron obligados a abandonar el edificio sobre las 09.00 (hora local). "Un bombero llamó a las puertas, hablando con todo el mundo para que bajara porque había una amenaza de bomba", ha indicado el fiscal Marson Nascimento.

El hotel Saint Peter, en la zona central de Brasilia, cerca de la Explanada de los Ministerios, tiene 482 apartamentos, 15 pisos y un espacio para eventos.

Al final de 2013, el exjefe de Gabinete de Lula, José Dirceu, condenado por el caso 'Mensalao', pidió autorización para salir de prisión y trabajar como gerente de este hotel. Iba a recibir un sueldo de 20.000 reales (unos 8.000 dólares) por el empleo. Dirceu acabó renunciando al trabajo después de la repercusión que tuvo en la prensa.