Por Leonardo Goy y Guillermo Parra-Bernal
BRASILIA/SAO PAULO, 29 mayo, 29 May. (Reuters/EP) -
- El regulador anti monopolios de Brasil CADE aplicó a seis cementeras una multa combinada de 3.100 millones de reales (1.400 millones de dólares) por arreglar precios durante dos décadas y les ordenó desprenderse de varios activos, una dura decisión que una compañía ya adelantó que apelará.
Votorantim Cimentos SA, Intercement Brasil de Camargo Correa SA, Itabira Agro Industrial SA y Cia de Cimentos Itambé SA, la suiza Holcim Ltd y Cimpor Cimentos de Portugal SGPS SA acordaron fijar precios para eliminar a rivales del mercado, dijeron los miembros del Consejo Administrativo de Defensa Económica (CADE) en una audiencia que duró 10 horas.
CADE ignoró los argumentos de las compañías de que no había pruebas de que hubo un cartel de precios y les ordenó reducir un 20 por ciento la capacidad instalada en grandes mercados en lo referente a servicios de concreto. El fallo también intima a las compañías a terminar las participaciones accionarias cruzadas.
El fallo, tras una investigación de ocho años, se produce después de acusaciones de excesos en costos que han plagado los preparativos de la Copa Mundial de fútbol que se disputará en Brasil en junio y julio.
"Este cartel era tan fuerte que tenía metas estratégicas claras", dijo el consejero del CADE Márcio de Oliveira Junior. Las seis compañías nombradas en el fallo controlan alrededor de tres cuartas partes del mercado doméstico de cemento y concreto.
El CADE también impuso sanciones a Abesc, un grupo que representa a los productores de concreto; a ABCP, que agrupa a los productores de cemento Portland de Brasil; y a SNIC, que representa a las fábricas locales de cemento.
Algunos abogados dijeron que la litigación podría durar años si las compañías deciden apelar el fallo. El CADE había previamente bloqueado cualquier intento de llegar a un arreglo extrajudicial.
Uno de los abogados involucrados en el caso, que pidió la reserva de su nombre, dijo a Reuters que la severidad de las multas era inédita en casos similares en el mundo. Ejecutivos del sector cementero señalaron que el CADE no tiene poder legal para imponer ventas de activos a las compañías.
Votorantim, el mayor productor de cemento de Brasil, apelará el fallo "porque es injustificado, carece de fundamento legal, e ignora los hechos del mercado", dijo la compañía en un comunicado. SNIC también adelantó que planea apelar la decisión.
La estructura de la industria cementera de Brasil es muy despareja. Hay grupos que tienen un fuerte control del mercado en regiones específicas, lo que incrementa la posibilidad de colusión para fijar precios.
La cantidad de productores se redujo a alrededor de 10 en 2011 desde las casi dos docenas que había a comienzos de la década de 1990.
Según el fallo, Votorantim tendrá que pagar una multa de 1.500 millones de reales, y Cimpor 297 millones. CADE multó a Intercement Brasil, Itabira y Holcim con 241, 411 y 508 millones de reales respectivamente. Itambé tendrá que pagar 88 millones de reales.
(1 dólar = 2,24 reales)