Actualizado 30/10/2007 15:33

Brasil.- Valencia y Manos Unidas desarrollarán proyectos contra la sequía que favorecerán a 35.000 brasileños


VALENCIA, 30 Oct. (EUROPA PRESS) -

El consejero de Inmigración y Ciudadanía de la Generalidad valenciana, Rafael Blasco, y la presidenta nacional de Manos Unidas, Begoña de Burgos, firmaron hoy un convenio de colaboración para la puesta en marcha de un plan a largo plazo para la mejora de las condiciones sociales, económicas y ambientales de las personas y familias que se encuentran en comunidades rurales del semiárido brasileño en los estados de Pernambuco y Paraíba, lo que favorecerá a 35.000 personas.

Según informaron fuentes de la Generalidad valenciana en un comunicado, el Consejo aportará a este plan un millón de euros que permitirá desarrollar una serie de actividades que "mejorarán sustancialmente la calidad de vida de los habitantes de dichas zonas". Para Blasco, el acceso al agua "es un Derecho Humano" porque "el agua es salud, es fundamental para alcanzar la seguridad alimentaria, es desarrollo productivo, es habitabilidad digna y es un recurso natural cuya preservación es imprescindible".

Las dos zonas incluidas (más o menos dos veces España) constituyen una de las regiones más secas de Brasil. La disponibilidad de agua potable es limitada, la población con acceso al agua potable es de un 25 por ciento y la subsistencia alimentaria es difícil. Además, la falta de acceso a procesos formativos contribuyen a aumentar las enfermedades entre la población, principalmente la mortalidad infantil.

Según la Generalidad, esto ha supuesto que durante muchos años la "única opción" fuera emigrar a las grandes ciudades y vivir en condiciones precarias. Blasco subrayó la necesidad de impulsar actividades de este tipo en los países y sociedades "más necesitadas", "porque la emigración no es la solución para la mejora de la calidad de vida de estas personas".

Por su parte, la presidenta nacional de Manos Unidas indicó que en este área el papel de la mujer es fundamental, ya que en la mayoría de los países en desarrollo, son ellas las responsables de obtener agua, así como de gestionar las formas de consumo en los hogares. "Pero buscar agua es un servicio pesado, consume horas de trabajo diario y de caminatas", dijo.

150 CISTERNAS.

A través de las actividades que se desarrollarán se prevé el acceso, control y manejo del agua por parte de las familias para el consumo humano y para la producción gracias a la instalación de 150 cisternas, que captarán el agua de la lluvia.

Esta estrategia se complementa mediante la capacitación y la formación a los jóvenes en nuevas sistemas de gestión y desarrollo así como, en la instalación de unidades de producción familiar solidarias, "instrumento necesario para emprender un cambio que consolide un futuro sostenible y esperanzador para estas personas", afirmó Blasco. Estas actuaciones forman parte de la primera fase del PEI. En 2009 se pondrá en marcha la segunda parte que ampliará las actuaciones realizadas en las zonas de sequía.

Blasco agradeció la labor que está desarrollando Manos Unidas, "ejemplo de solidaridad y de buena gestión en el desarrollo de acciones de cooperación al desarrollo en las zonas más deprimidas de nuestro planeta".

La Generalidad ha concedido desde el año 1996 una subvención a la asociación Manos Unidas de cuatro millones de euros, a través de 25 proyectos. Aproximadamente el 70 por ciento de ellos, son proyectos de desarrollo ejecutados en su mayoría en Iberoamérica, mientras que el resto, están centrados en la realización de actividades de sensibilización en España.

Este programa es uno de los 25 Planes Estratégicos de Intervención definidos en el Plan Anual 2007 de la Cooperación al Desarrollo de la Generalidad valenciana.