Actualizado 05/07/2014 16:23

El FIFA Fan Fest o el barrio de toda la vida, dos opciones para ver los partidos

Fifa Fan Fest em Copacabana
Foto: RIOTUR

RÍO DE JANEIRO, 5 Jul. (Notimérica/EP)

   Una de las imágenes más recurrentes del Mundial de Fútbol de Brasil es la playa de Copacabana en Río de Janeiro abarrotada de aficionados viendo los partidos en una pantalla gigante: es el FIFA Fan Fest, una especie de 'parque temático' del fútbol que se ha convertido en la opción preferida de la mayoría de aficionados. Pero no es la única, los barrios esconden sus propios 'fan fest'.

   En lo que va de Mundial el FIFA Fan Fest de Río ha recibido a más de 630.000 personas -una media de 20.000 cada día--. Es el mayor y el más icónico por estar en una de las playas más famosas del mundo, pero cada una de las 12 ciudades sede tiene una réplica. La estrella es la pantalla gigante de 150 metros cuadrados que retransmite todos los partidos, pero hay mucho más: bares, actuaciones musicales y hasta atracciones de los patrocinadores oficiales del Mundial.

   Para entrar en el recinto, que es gratuito pero está cuidadosamente vallado, hay que atravesar un estricto control de seguridad, y es frecuente que se formen tapones en los días de mayor afluencia por el escaso número de tornos.

   Cuando no hay partido hay conciertos de artistas brasileños como Sorriso Maroto, Naldo, Beth Carvalho, Fernanda Abreu, Arlindo Cruz, Anitta o Monobloco, aunque la mayoría del tiempo suena pop internacional. A la mayoría de los presentes no parece importarles mucho la música, está bien si sirve para animar la fiesta.

   Lo que más abunda son los enormes logos de las marcas patrocinadoras, ya que cada una cuenta con su propio estand: Hyundai ha colocado dos coches y Sony patrocina una tirolina que permite sobrevolar la zona. Cada día pasan por ella unas 400 personas. También tiene su propio estand México, una herramienta de promoción turística que está un poco menos concurrida desde la polémica eliminación de la selección azteca, según confirmaba una de sus trabajadoras a Notimérica/EP.

   En el apartado de hostelería los bares ofrecen cerveza y comidas a precios sensiblemente mayores a los de la calle, aunque no son exagerados. Como el FIFA Fan fest ocupa gran prácticamente una sección entera de playa dejó sin trabajo a los 'barraqueros' que montan cada día su chiringuito en la playa. Para compensarles, esos barraqueros pueden ahora vender cerveza dentro del recinto cediendo parte del beneficio a los organizadores.

   La sensación generalizada es que el FIFA Fan Fest funciona bien, --el secretario general de la FIFA, Jérôme Valcke, dijo que eran "todo un éxito"_pero no convencen a todo el mundo. José, de 26 años, acudía por primera vez esta semana con unos amigos y no lo veía claro: "Está todo pensado para el consumo, parece un centro comercial, y además con estas vallas ni siquiera se ve el mar, que está aquí al lado", se quejaba.

ALZIRÃO, ORGULLO DE BARRIO

   Las alternativas al FIFA Fan Fest se cuentan por centenas, pero en Río de Janeiro, el contrapunto más evidente sería 'Alzirão', situado en el barrio de Tijuca, cerca de Maracaná. El barrio está muy alejado del 'glamour' de Copacabana, pero con la autenticidad de unos vecinos que decoran la calle con entusiasmo desde hace 35 años.

   En 1978, durante el Mundial de Argentina, un grupo de amigos sacaron a la calle una televisión de 20 pulgadas para ver los partidos. Al terminar, cada uno cogía su instrumento y juntos improvisaban una batucada para celebrar las victorias de Brasil. Ahí nació 'Alzirão', una conjunción de los nombres de la calle Alzira Brandão.

   Cuatro años después, en el Mundial de España de 1982, los vecinos ya tenían más experiencia y empezaron a introducir decoración y a pintar el asfalto de  verde y amarillo. Poco a poco la fiesta fue creciendo, incorporando novedades cada cuatro años. Hoy es una macrofiesta que reúne a decenas de miles personas en los partidos de Brasil y cuenta con subvenciones públicas y el patrocinio de una marca de cerveza.

   El ambiente es muy diferente al del FIFA Fan Fest: ausencia total de hinchas extranjeros y un público más familiar, muchos venidos de los barrios populares de la zona norte de la ciudad. La diferencia de público también se nota en la música: escuelas de samba y 'passistas' moviendo sus caderas sobre el escenario en el descanso del partido. Más cerca del Sambódromo que de un parque de atracciones.