LOS ÁNGELES, 3 Jul. (Notimérica/EP) -
Los residentes de Beverly Hills que viven al lado del nuevo domicilio de Justin Bieber han decidido contratar a personal de seguridad para controlar al joven cantante y evitar que siga realizando semejantes fiestas.
Los nuevos vecinos de Bieber están en guerra con él. El último encontronazo del cantante con la justicia tuvo lugar la madrugada de este martes, cuando la Policía tuvo que intervenir dos veces a causa del ruido provocado por las escandalosas juergas del canadiense.
A pesar de que Bieber sólo lleva un mes en su nueva vivienda, ésta no ha sido la primera vez que la Policía recibe quejas por su comportamiento. Hace poco, los residentes denunciaron el exceso de ruido que provenía de su domicilio, así como el uso abusivo de cannabis, por lo que algunos de ellos han asegurado que se han ahogado en los vestíbulos, según publica TMZ.
Por ello, la Asociación de Propietarios (HOA-Home Owners Alliance) se ha reunido esta semana y ha optado por contratar a vigilantes que trabajarán desde las 20.00 hasta las 8.00 horas. Tendrá que ser el casero de Bieber quien pague su salario.
La asociación no puede perseguir al cantante de pop porque él sólo es un inquilino. El equipo de seguridad comenzó su trabajo este martes pero, de momento, no tendrán mucho que hacer ya que Justin Bieber se encuentra ahora mismo en Miami.
Ya se sabía que el joven cantante no es un ningún vecino ejemplar. De hecho, esa fue la razón -además de los cargos de vandalismo presentados contra él por atacar con huevos la fachada de una casa colindante-, que le obligó a tener que abandonar su casa del barrio de Calabasas, en Los Ángeles, propiedad que pasó a manos de Khloé Kardashian en marzo.