Actualizado 15/08/2008 09:09

Chile.- Entregan el plan para un proyecto eléctrico en Chile en medio de grandes protestas de los ecologistas

COYHAIQUE (CHILE), 15 Ago. (Reuters/EP) -

El estudio de impacto ambiental para la construcción de hasta cinco centrales hidroeléctricas en el extremo sur de Chile fue presentado ayer ante la autoridad local, lo que provocó airadas protestas de grupos ecologistas en la zona.

Este proyecto es considerado clave para la diversificación de la estrecha matriz energética del país, pero ha sido fuertemente criticado por grupos ecologistas, tanto locales como extranjeros, que aseguran que afectará el ecosistema y la poderosa actividad turística de la lluviosa región austral de Aysén, donde se ubica.

El complejo, ubicado unos 1.700 kilómetros al sur de Santiago, contempla una inversión de unos 3.200 millones de dólares (1.556 millones de euros), por encima de las primeras proyecciones, y se estima que su construcción total demorará entre 11 y 12 años, según el estudio de impacto ambiental (EIA) entregado por HidroAysén, firma a cargo del proyecto.

Hernán Salazar, gerente general de HidroAysén, controlada por las generadoras Endesa Chile y Colbún, comentó que ya se invirtieron cerca de 12 millones de dólares (8 millones de euros) y tres años en el estudio de impacto ambiental. "Hemos diseñado nuestro proyecto con los más altos estándares técnicos disponibles", aseguró Salazar a los periodistas en Coyhaique, capital de la sureña región de Aysén.

Por su parte, Bernardo Canales, gerente técnico del proyecto, explicó a periodistas que el encarecimiento del proyecto se debe a los mayores precios de los insumos para su construcción, además del alza en los combustibles y en la tecnología que se utilizará. "La inversión podría ser más si las condiciones siguen cambiando", dijo Canales.

ENTREGA

Desde muy temprano, grupos ecologistas expresaron su rechazo a las represas con protestas a las afueras del recinto donde los ejecutivos de HidroAysén explicaban a los periodistas detalles técnicos del proyecto. Más tarde realizaron una bulliciosa manifestación en las afueras de la sede de la sociedad en Coyhaique y a metros de la Corema, fuertemente resguardadas por la Policía local.

"Este proyecto viola gravemente la naturaleza (...) son una ofensa a la dignidad de las personas y a la creación", dijo a Reuters el Obispo de Aysén, Luis Infanti, quien participó junto a decenas de personas de la protesta que bloqueó por momentos una de las principales calles de Coyhaique. Los manifestantes pedían a gritos que la Corema declare inadmisible el plan ambiental de las centrales.

"Sabemos que el país necesita energía, pero no es la forma más amigable para el medio ambiente, hay otras alternativas", dijo Héctor Caballero, un profesor que junto a un grupo de sus alumnos participó de las protestas.

ENTRE RAZON Y EMOCION

Sobre las manifestaciones en contra del proyecto, el gerente general de HidroAysén pidió "dejar de lado un poco las emociones para dar paso a la razón. Chile necesita este proyecto, estas centrales". Salazar y Canales resaltaron los esfuerzos de la sociedad en mitigar el impacto que podrían tener las centrales en los poblados aledaños y en el ecosistema de la zona.

Las cinco centrales se construirán sobre los cauces de los ríos Baker y Pascua, los más caudalosos de la región, y la firma ya había anunciado que reduciría el área a inundar para construir sus embalses. Precisamente para compensar la menor área a inundar, HidroAysén solicitó a las autoridades más derechos de uso de agua y espera una respuesta positiva a su petición, de lo contrario, el proyecto podría sufrir una nueva modificación.

"Estamos aumentando costos para minimizar impacto ambiental", aseguró Salazar. La sociedad invertirá unos 150 millones de dólares (101,5 millones de euros) en mitigación de daños y tiene previsto relocalizar a 14 familias a otros predios, vía planes de apoyo y compensación.

Los ejecutivos estimaron que si el EIA es aprobado, la construcción de la primera central podría comenzar hacia fines de 2009 y hacia 2020 estarían listas las cinco plantas. La compañía espera que a mediados del próximo año esté listo además el EIA para la línea de transmisión, cuyos estudios encargó a la firma Transelec.

Las centrales que construirá HidroAysén tendrán una capacidad instalada de 2.750 megavatios y generarán una energía media anual de 18.430 gigavatios por hora, los que serán incorporados al Sistema Interconectado Central (SIC), que abastece a más del 93 por ciento de la población chilena.