SANTIAGO, 23 May. (De la corresponsal de EUROPA PRESS Claudia Riquelme) -
Unos 15.000 damnificados, 700 realojados, carreteras interrumpidas y graves daños materiales en infraestructuras viales han dejado el temporal de viento y lluvia que desde el miércoles afecta a la zona centro sur de Chile, según confirmaron este viernes las autoridades del gobierno. Hasta el momento no hay registro de víctimas fatales.
Este país sudamericano, que hace dos semanas tenía más del 70 por ciento de sus comunidades en situación de sequía debido a la falta de aguas lluvias, ha pasado a registrar un amplio superávit de precipitaciones que, por ahora, estarían alejando los temidos racionamientos energéticos que no habían sido descartados por la autoridad.
La situación, que se ha vuelto compleja incluso en la capital chilena, ha obligado a las autoridades a suspender las clases para los estudiantes y a realizar cortes del suministro de agua potable que afectan, desde la madrugada, a nueve barrios de Santiago, debido al desbordamiento del Río Maipo.
Más al sur, Chile ha quedado literalmente dividido en dos, debido a la interrupción de la Ruta 5 Sur, que une a la zona centro con el extremo sur del país, por el desbordamiento de los ríos Tinguiririca y Teno. Se ha suspendido no sólo el paso de los automóviles particulares, sino también de los autobuses que trasladan pasajeros desde y hacia las provincias.
Efectivos de las Fuerzas Armadas trabajan en las regiones más extremas para rescatar en helicópteros y embarcaciones a las personas que han quedado aisladas.
El viceministro del Interior, Felipe Harboe, reconoció que la Región del Maule, a unos 400 kilómetros al sur de Santiago, es la más afectada.