Actualizado 14/06/2014 22:07

Temporal, el poema social definitivo que Nicanor Parra recuperó 27 años después

El poeta en sus clases en la Universidad
Foto: TWITTER

SANTIAGO, 14 Jun. (Notimérica/EP) -

   Nicanor Parra había logrado sacudirse por fin de todos los rastros literarios para acceder a la realidad, así describió el poeta chileno la composición en la que trabajó en abril de 1987 coincidiendo con la visita del Papa, Juan Pablo II, al país andino y unas terribles inundaciones.

   En aquellos convulsos días se vivieron masivas pasiones cristianas, como también protestas contra el régimen de Pinochet de eco mundial. Parra siguió con especial ahínco los pasos del sumo pontífice. Tras su visita, un temporal de lluvias e inundaciones asolaron bastas zonas de Chile. También sobre eso escribió un poema. Largo, social y político. Pero se perdió.

   El llamado 'antipoeta' traspapeló esa composición poética en la que creía haber impregnado en el papel el "lenguaje de la tribu", esto es una combinación de la academia, la calle y la feria. Buscar las palabras adecuadas, crear inusitadas combinaciones métricas, conciliando lo alto y lo bajo, lo solemne y lo vulgar. Por titulo: Temporal.

   Al ser cuestionado sobre dicho poema, Parra afirmaba: "Es un poema largo, es un libro. En Temporal está todo hecho en lenguaje de la tribu y con el tema de la tribu". El desbordamiento del río Mapocho sensibilizó al poeta y se dice que en ese momento nació la poesía social.

   "Es una necesidad impostergable en mí, es decir, yo no quiero ser un fotógrafo de las imágenes oníricas, sino que quiero ser la voz de la tribu, y no tan sólo la voz de la tribu, sino que la conciencia de la tribu", describía el poeta sobre sus inquietudes: "en último término, lo que me interesa a mí es la crítica social".

   Ahora, tal y como cuenta el diario chileno 'La Tercera', Temporal verá la luz tras una rocambolesca sucesión de casualidades por la cual Adán Méndez, hombre de confianza de Parra, accedió el pasado año a una grabación de la entrevista que el crítico literario René De Costa mantuvo con Parra en Chicago en 1988, en la cual no sólo hablaba varias veces de Temporal, también lo leía. Dos veces. Entero.

   "Cuando apareció, Nicanor quiso que se publicara de inmediato", cuenta Méndez. "El poema le importa mucho, él sabía que había batido nuevos récords", aseguró Méndez. En el presente, y cuando Parra llega al siglo de edad, se va a celebrar con exposiciones de sus artefactos, libros visuales y nuevas ediciones de sus títulos. Y por supuesto, el hijo pródigo de Parra, su obra Temporal.

   Durante estos años, Parra anduvo revisando y perfeccionando su poesía, obsesionado con 'el lenguaje de la tribu' desarrollado en su obra perdida. Aseguran que efectivamente lo logró. En cualquier caso, Parra siguió ajustando su escritura, pasado los 80 años, en los 'Discursos de Sobremesa'. No se detiene. Mes a mes, acumula cuaderno tras cuaderno. A partir de ahora con su amadísima obra sobre su estantería.