BOGOTÁ, 7 Jun. (Notimérica/EP) -
Para acabar con las diferencias "del pasado", el presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, y el alcalde de Bogotá, Gustavo Petro, se dieron este viernes un abrazo de reconciliación, que no ha tardado en desatar la polémica en las redes sociales.
De cara a la segunda vuelta a las elecciones presidenciales, que se celebrarán el próximo 15 de junio, ambos mandatarios parecen dispuestos a solucionar las rencillas que han ido teniendo lugar en los últimos meses después de que Santos ratificara la destitución de Petro de su cargo, ignorando las medidas cautelares que aconsejaban esperar a que la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) decidiera sobre el fondo del asunto.
Sin embargo, y tras la vuelta a la Alcaldía de Petro que fue ordenada por el Tribunal Superior de Bogotá, el presidente y el ex guerrillero del M19 han ido trabajando en su reconciliación, sobre todo, después de que el 'uribista' Óscar Iván Zuluaga ganara la primera vuelta de las elecciones con un 29 por ciento de los votos frente a un 25 por ciento de Santos; algo que no agradó tampoco al alcalde.
Antiguos enemigos de Santos, como el Movimiento Progresistas de Petro, están apoyándolo al presidente en su intención de conseguir una salida negociada al conflicto armado. Ahora reina el pánico entre la izquierda de que una victoria de Zuluaga paralice las negociaciones de paz que el Gobierno de Santos mantiene con las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) en La Habana.
"Muchos se sienten identificados con la paz, como mi ex contrincante en la pasada contienda, Antanas Mockus, y el alcalde (Gustavo) Petro, con quien tengo algunas diferencias en otros temas. Agradezco ese apoyo a la paz", señaló Santos el viernes en un homenaje al excanciller Augusto Ramírez Ocampo, en Bogotá.
Esta semana se ha creado el Frente Amplio por la Paz, una iniciativa creada por la izquierda colombiana y que pretende respaldar la continuidad del diálogo entre el Gobierno y las FARC. Forman parte de este movimiento los partidos Polo Democrático, Unión Patriótica, Alianza Verde, Poder Ciudadano y Progresistas, así como por la Organización Nacional de Indígenas de Colombia, Mujeres por la Paz.
CRÍTICAS EN LAS REDES SOCIALES
Aunque Petro llegó a decir que Santos estaba "incapacitado para hacer la paz en Colombia" y el presidente no dudó en su día de calificar al ex guerrillero de "mal alcalde, sin duda alguna", las viejas diferencias han quedado disipadas en el abrazo simbólico de este viernes; algo que no ha desatado la disputa en las redes sociales.
Los usuarios de Twitter han llegado a calificar el emotivo encuentro de "oportunismo en su más vulgar expresión" o incluso han planteado: "¿No creen ustedes que ya va siendo hora de cambiar de sede los diálogos de paz?¿Otra cara?".
Otros más optimistas han llegado a alabar a Petro por no guardar rencor contra Santos o han manifestado: "Así tiene que ser la paz, todos unidos".
Según la revista Semana, la alianza, en términos de cálculo político, podría ser beneficiosa para el ex guerrillero porque al firmar una tregua con la Casa de Nariño, Petro gana un poderoso aliado a lo que le queda de mandato.
Sin embargo, en términos de imagen puede que para los votantes de Bogotá sea confuso ver unidos a quienes hasta hace pocos tiempo tenían serios problemas de entendimiento y no dudaban en emitir duras críticas el uno contra el otro.