PARIS, 8 May. (EUROPA PRESS) -
El ex senador colombiano y antiguo rehén de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) Luis Eladio Pérez cree que la franco-colombiana Ingrid Betancourt será puesta en libertad "muy pronto", porque, en su opinión, la guerrilla quiere lograr un reconocimiento político y puede aprovechar la inminente Presidencia francesa de la Unión Europea para hacer un gesto.
"Ingrid saldrá muy pronto porque a partir de ahora las FARC tienen prisa. Ya no quieren formar parte de los grupos terroristas de la comunidad europea", asegura Luis Eladio Pérez en una entrevista concedida a la revista francesa VSD.
Así pues, como el presidente Nicolas Sarkozy presidirá la UE a partir de julio "no habrá mejor ocasión para las FARC, que saben que será él quien solicite la suspensión de las sanciones en su contra", agrega el antiguo senador.
El presidente Sarkozy ha hecho de la liberación de Ingrid Betancourt una causa nacional y desde su llegada al Elíseo hace ahora un año ha desplegado una intensa labor diplomática para lograr la liberación de Betancourt, en manos de la guerrilla desde hace seis años.
La última de las iniciativas del mandatario galo fue pedir a su homólogo venezolano, Hugo Chávez, que siga mediando ante las FARC para lograr un acuerdo humanitario con el Gobierno colombiano que permita la liberación de los rehenes.
La petición se la hizo llegar a través del ministro galo de Asuntos Exteriores, Bernard Kouchner, que hizo recientemente una gira por Colombia, Venezuela y Ecuador para relanzar el diálogo entre los tres países e intentar reavivar los esfuerzos de cara a lograr la liberación de Ingrid Betancourt. Sus gestiones, no obstante, se han saldado con escasos frutos.
De hecho, la Federación Internacional de Comités de apoyo a Ingrid Betancourt (FICIB) manifestó su "decepción" y apuesta ahora por aumentar la presión internacional, especialmente de Argentina, Chile y Brasil, sobre el presidente colombiano, Álvaro Uribe, para que devuelva a Hugo Chávez su papel de mediador y habla incluso de ejercer una 'presión económica' para aislar a Bogotá y forzar a Uribe a buscar un acuerdo humanitario con las FARC.