Camila Cienfuegos
Foto: REUTERS

BOGOTÁ, 8 Jun. (Notimérica/EP) -

   Doce son las mujeres que forman parte de la delegación de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) en La Habana (Cuba) para las negociaciones de paz que la guerrilla mantiene actualmente con el Gobierno de Colombia.

   Camila Cienfuegos es integrante de la guerrilla desde que tiene 14 años y su pareja es Pablo Catatumbo, uno de los actuales representante de las FARC en los diálogos de paz. La guerrillera realiza las labores de comunicación de la guerrilla con la prensa y lleva la web junto con Patricia Cano, esposa del fallecido Alfonso Cano.

   Diana Grajales tiene 27 años y lleva 9 en las filas de la guerrilla en el Bloque Oriental de las FARC. Después de tanto tiempo en el conflicto armado se siente una privilegiada por poder participar en este diálogo histórico y tiene como objetivo conseguir que se firme la paz.

   "Estamos en un momento definitivo porque nosotros siempre hemos tenido la voluntad y ahora el Gobierno se ha mostrado interesado", comentó Grajales, que tiene claro que esta es su oportunidad para volver a su antigua vida civil junto a su familia porque "cuando se lucha en la clandestinidad se vive con la angustia de que en algún momento te va a pasar algo a ti o a tus seres queridos", según Noticias Caracol.

   Otras de las mujeres en La Habana son Victoria Sandino, periodista de profesión y comandante del Frente 21 que opera en el sur del departamento de Tolima, en el centro de Colombia, y que lleva 27 años en la guerrilla. También la médica Laura Villa es combatiente en el Bloque Oriental de las FARC.

   Entre las demás negociadoras se encuentra Tanja Nijmeijer, quien desempeña labores de traducción dentro de la organización. Según las autoridades colombianas, la holandesa estaba instruyendo en ciencias políticas a los miembros del Bloque Oriental de las FARC.

PROCESO DE PAZ

   Desde el 8 de octubre de 2012 en Oslo y el 19 de noviembre de ese mismo año en La Habana, Gobierno y FARC llevan a cabo un diálogo de paz basado en una agenda de cinco puntos: política de desarrollo agrario integral, participación política, fin del conflicto, solución al problema de las drogas ilícitas y víctimas.

   Tras seis meses de intensas negociaciones, finalmente el 26 de mayo de 2013 las partes pactaron sobre desarrollo agrario, el primer punto de la agenda y el más importante para la guerrilla, ya que sobre él pivota toda su lucha armada.

   El segundo acuerdo del proceso de paz, el relativo a participación política, llegó el pasado 6 de noviembre de 2013. Los puntos clave son el compromiso para crear un estatuto de la oposición, que establezca sus derechos, deberes y garantías, y una reforma electoral, que incluye circunscripciones transitorias.

   A ellos se suma un tercer acuerdo alcanzado sobre el problema de los cultivos de drogas ilícitas, por el cual las FARC se han comprometido a romper todos sus vínculos con el narcotráfico, una de sus principales fuentes de financiación.

   Con el pacto sobre víctimas, que se ha acordado este sábado, se habría logrado un acuerdo parcial en cuatro de los cinco puntos de la agenda, con lo que sólo restaría abordar los aspectos del punto 3, el de fin del conflicto, tales como desarme e integración de los miembros de la guerrilla, que estaría a cargo de la subcomisión acordada en el documento publicado este sábado.

   En cualquier caso, la agenda de negociación recoge explícitamente que hasta que no se cierren los cinco puntos de la negociación, ninguno de los acuerdos será vinculante.