BOGOTÁ, 2 Oct. (EUROPA PRESS) -
Las autoridades colombianas aseguraron hoy que tienen información sobre la ubicación de unos 4.000 cadáveres de víctimas de paramilitares en fosas comunes, de los cuales la mitad serán recuperados en 2008. En dos años han desenterrado 960 cadáveres de víctimas, lo que modifica las estadísticas de homicidios.
El problema que tienen las autoridades encargadas de las estadísticas de violencia es que no saben qué hacer con la información de los muertos que han aparecido. En 2002, la cifra de muertes violentas estaba cerca de 30.000 casos. El año pasado hubo 17.206, 500 asesinatos menos que en 2005.
Los investigadores dicen que muchos de esos cuerpos llevan enterrados cinco años o más. Sin embargo, en la mayoría de los casos, la sola exhumación no da información suficiente para determinar una fecha aproximada del fallecimiento.
Si se logra establecer quién son las persona que están en la fosa, se podría averiguar por la fecha de su desaparición y sumar el homicidio a las cifras del año, pero ese proceso no es nada fácil, informa hoy el diario 'El Tiempo'.
En ese sentido, la jefe del grupo de Criminalística del Departamento Administrativo de Seguridad (DAS), unidad encargada de las exhumaciones, afirmó que el margen de error en ese procedimiento es del 20 al 30 por ciento. "Dependemos de que se puedan identificar los cadáveres, y hasta ahora eso ha sido posible en apenas 63 casos", agregó una fuente de la Fiscalía.
En este momento, los 960 cadáveres recuperados entre 2006 y 2007 no aparecen en las estadísticas de delitos en el país. En los registros del Instituto Nacional de Medicina Legal no han sido contabilizados y la Policía no sabe cómo llevar la cuenta. Hasta ahora, explicó un oficial, cuando se encontraban fosas comunes los cuerpos eran contabilizados como asesinatos correspondientes al año de la exhumación.
Si esa decisión se mantiene con las fosas que han entregado los paramilitares, los resultados del homicidio en los dos últimos años variarían sustancialmente.
El Centro de Recursos para el Análisis de Conflictos (CERAC)-- que trabaja el tema de la seguridad ciudadana--, plantea crear una nueva categoría en las estadísticas sobre delincuencia en el país que se denomina 'cuerpos recuperados'. Su director, Jorge Restrepo, dijo que en la medida en que puedan identificarse los cuerpos se ajustaría la cifra de homicidios del año correspondiente, sin riesgo a falsear las cifras sobre violencia.
"Lo que está pasando es que está saliendo a flote la verdad sobre los muertos de la guerra, precisamente como resultado de la política de paz del Gobierno", afirmó Restrepo.