Actualizado 20/05/2014 13:26

Los responsables de la muerte de 33 niños se enfrentan a 40 años de cárcel

Autobús incendiado en Magdalena, Colombia, con 31 niños muertos
Foto: REUTERS

BOGOTÁ, 20 May. (Notimérica/EP) -

   El conductor del autobús que se incendió el pasado domingo en el departamento de Magdalena, en el norte de Colombia, provocando la muerte de 33 niños, y el integrante de la iglesia a la que pertenecían los menores, encargado de contratar el servicio de transporte, podrían enfrentarse a penas de hasta 40 años de cárcel por el delito de homicidio culposo agravado.

   Así lo ha anunciado este lunes el director nacional de Fiscalías, Luis González, que afirma que existen suficientes pruebas en contra de Jaime Gutiérrez Ospino (conductor del bus) y de Manuel Ibarra (pastor de la iglesia). En este sentido, ha explicado que ambos conocían el estado del vehículo y aun así "no tomaron las medidas de seguridad para evitar esta tragedia".

   El conductor del autobús no tenía permiso de conducir y el vehículo, que llevaba más de dos años sin pasar ninguna revisión técnica, tampoco contaba con el seguro pertinente, de acuerdo con la información del diario 'El Colombiano'. El hombre, que se dio a la fuga tras el trágico siniestro, fue detenido cinco horas después gracias a la información aportada por los habitantes del municipio de Fundación.

   Por su parte, Ibarra también ha sido detenido por la Policía, después de que la Fiscalía General de la Nación emitiese una orden de captura en su contra, según ha confirmado el director Nacional de la Policía de Tránsito y Transporte de Colombia, el brigadier General Carlos Ramiro Mena.

EL TRÁGICO SUCESO

   Por ahora no hay una explicación oficial a las causas del incendio. En un primer momento se habló de que probablemente el autobús transportaba gasolina de contrabando, una práctica bastante común en esta zona de Colombia. No obstante, parece cobrar fuerza la hipótesis de que todo se debió a un fallo de tipo mecánico.

   El director de la Policía Nacional de Colombia, Rodolfo Palomino, explicó que "al parecer una falla mecánica habría provocado el incendio dentro del bus en el que viajaban varias familias de la Iglesia Pentecostés".

   Según el diario 'El Tiempo', el autobús funcionaba a gas pero contaba con gasolina de apoyo, lo que le permitía circular de modo alternativo con ambos tipos de combustible. Así, se cree que el conductor intentó cambiar de gas a gasolina y fue entonces cuando se produjo el fuego.

   El autobús no tenía salidas de emergencia, por lo que los menores quedaron atrapados en su interior y murieron calcinados. El conductor huyó del lugar y pese a los intentos infructuosos de los vecinos por apagar las llamas no se pudo hacer nada por los menores.