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BOGOTÁ, 13 May. (Notimérica/EP) -
El presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, ha afirmado este lunes que las negociaciones de paz con las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), que se llevan a cabo en La Habana (Cuba), están al "60 o 65 por ciento". "Ya pasamos la mitad del camino", ha asegurado el mandatario colombiano.
En este sentido, el candidato a la reelección ha insistido en que confía "plenamente" en firmar la paz con la guerrilla, aunque entiende que haya cierto escepticismo en la opinión pública a causa de los fracasos previos en esta materia, durante una entrevista en la emisora local RCN Radio.
"La guerra no ha terminado, queremos que termine, pero mientras tanto, estamos en guerra", ha señalado el presidente, que reconoce que "es difícil explicarle a la gente por qué siguen matando policías y soldados, si se está hablando de paz". En cualquier caso, mantiene su idea de que sean los ciudadanos quienes aprueben el pacto definitivo cuando las negociaciones lleguen al cien por ciento.
"Ya pasamos la mitad del camino (en los diálogos) y los puntos más complicados, por su puesto que quedan todavía temas complejos", ha insistido Santos. "Yo sabía que estos procesos no eran fáciles y sabía también el costo político y los enemigos de la paz que nos íbamos a ganar con este proceso, pero tampoco pensé los alcances de estas personas", ha apostillado.
El jefe de Estado ha reiterado que "un conflicto de 50 años no puede negociarse en 50 meses", pero asegura que se ha avanzado a un buen ritmo y confía en poder terminar este año. "Yo confío que podamos terminar este año", ha añadido Santos, que cree que después de las elecciones presidenciales --previstas para el próximo 25 de mayo-- se podrá acelerar el proceso.
Asimismo, ha explicado que las FARC tienen voluntad política y que el mensaje para los colombianos es que "se están dando pasos importantes para lograr la paz". "La voluntad política de las FARC está ahí y si no fuera así yo me levantaba inmediatamente de esa mesa", ha dicho el mandatario, que concluye que la guerrilla ha entendido que "por la vía de las armas no van a lograr nada porque con el tiempo van a terminar en una tumba o en una cárcel".