Exiliados celebran este tipo de medidas pero recuerdan que todavía hay presos políticos y aún no se ha logrado una "auténtica libertad"
MADRID, 1 Abr. (EUROPA PRESS) -
El presidente de Cuba, Raúl Castro, que hace unas semanas sucedió a su hermano Fidel tras casi cinco décadas en el poder, ha comenzado a poner en marcha las primeras medidas para lograr una apertura en el país. Desde permitir a la población comprar electrodomésticos o usar sin restricciones teléfonos móviles hasta hospedarse en cualquiera de los hoteles que hay en la isla.
La última de estas medidas es la decisión de levantar la prohibición que impedía a los cubanos alojarse en hoteles reservados para turistas extranjeros, lo cual ya ha sido confirmado por gerentes extranjeros que operan en Cuba, como Sol Meliá y Accor. Directivos de empresas hoteleras anunciaron que se reunirán próximamente con los trabajadores de las instalaciones turísticas para notificar la medida.
"Sí, te puedo decir que ya podrán entrar los cubanos a nuestros hoteles. Era una decisión que estábamos esperando en las últimas semanas", afirmó a la agencia Reuters el gerente de un hotel del centro de La Habana que pidió no ser identificado. "En las próximas horas nos van a decir oficialmente cómo será, pero está claro que el precio no varía, nos regiremos por las tarifas actuales", añadió.
La prohibición que impidió a los cubanos entrar en los hoteles en los noventa coincidió con la apertura al turismo extranjero y fue motivo de frustración para los cubanos acostumbrados a pasar las vacaciones en hoteles en la década anterior. "Esta medida tiene dos objetivos: psicológico y económico", precisó un economista local que pidió no ser identificado.
TELÉFONOS MÓVILES
Otra de las medidas es el uso de teléfonos móviles, que hasta el 29 de marzo estaban exclusivamente reservados para los ciudadanos extranjeros y para los funcionarios gubernamentales. El mecanismo, dado a conocer por la Empresa de Telecomunicaciones de Cuba (ETECSA), se formalizará mediante el "contrato personal en la modalidad de prepago".
El Ministerio de Informática las Comunicaciones ha precisado que próximamente emitirá las regulaciones que permitirán asegurar la puesta en marcha y el control del programa de manera "ordenada y progresiva". Además, se informará a la población sobre los procedimientos para los cambios de titularidad de los que hasta la fecha lo habían adquirido por vía indirecta y sobre el inicio de los nuevos contratos.
Sin embargo, tras conocerse esta medida ya son varias las voces que la han criticado. En Madrid, la plataforma de exiliados Cuba Democracia Ya!, que en principio dijo que "todo lo positivo que pueda pasarle a los cubanos es algo digno de celebrar", advirtió que para que un cubano 'de a pie' pueda hacerse con un móvil tendría que ahorrar durante ocho meses.
En este sentido, precisan desde la plataforma que el coste de un teléfono móvil en Cuba ronda los 120 dólares, mientras que el salario mínimo de un cubano es inferior a 20 dólares. "Tiene que ser con unas tarifas más asequibles, de lo contrario la gente no podrá adquirir un teléfono. ¿Entonces de que sirve permitir a la población tener móviles si no los pueden comprar?", se preguntan.
"AUTENTICA LIBERTAD"
Desde Cuba Democracia Ya! insisten en su mensaje de celebrar las medidas de apertura porque, en definitiva, benefician a los propios cubanos, pero también no dejan de reclamar la adopción de mecanismos que lleven a una "auténtica libertad" en la isla, como exigir la libertad de los presos. "Animamos a Raúl Castro a llenarse de valor y acabar de dar el timonazo que demanda hoy la nación cubana", añaden.
En el campo de las comunicaciones también se han vertido críticas por la imposibilidad de acceder a internet o las cortapisas que se ponen para entrar en algunos blogs de la isla. En concreto, la organización de defensa de la libertad de prensa Reporteros Sin Fronteras se refiere al caso de la 'blogera' Yoani Sánchez, una de los más populares del país.
"Esas restricciones van contra las recientes medidas adoptadas por las autoridades para facilitar el acceso de los cubanos a los medios de comunicación, entre ellos a la red", indicó RsF. "Las muestras de apertura deben incluir mayor libertad de expresión", añadió la organización, que precisó que el acceso a blogs es "imposible" desde sitios públicos y "muy dificultoso" desde conexiones privadas.
Otra de las prohibiciones que se han levantado son las relativas a la venta de electrodomésticos para uso doméstico. De hecho, desde este mismo martes ya se pueden comprar sin restricciones y algunas tiendas de La Habana amanecieron surtidas con motos chinas, DVD y ollas de presión eléctricas, que estarán disponibles para los cubanos que tengan divisas para pagarlos.
ELECTRODOMESTICOS
Estos equipos sólo podían ser adquiridos hasta ahora por las empresas estatales, y no por el público en general. "Ahora los cubanos tenemos otras opciones y así resuelvo un poco la alternativa del transporte", explicó Raydel Leyva, de 42 años, después de comprar al contado una moto china por valor de unos 858 dólares en una céntrica tienda de La Habana.
Los artículos están a la venta en pesos convertibles, moneda 24 veces más fuerte que los pesos con los que el Estado paga el salario a sus empleados. Como promedio un cubano gana al mes unos 408 pesos, equivalentes a unos 17 dólares. No está claro cuándo comenzará la venta de ordenadores, también incluidos en la resolución estatal que dio luz verde a los cubanos para adquirir estos anhelados artículos.
Por su parte, Yamilé Batista, directora comercial de un centro en la capital explicó a Reuters que estaba esperando la llegada de 100 ordenadores por valor de 864 dólares, pero no aclaró cuándo comenzará su venta. "Hoy comenzamos a recibir los electrodomésticos (...) La resolución dice que hoy empieza este proceso, no es que hoy mismo lo ponemos a la venta", precisó.
El Gobierno cubano impuso en los noventa un sistema de doble moneda y creó una red de tiendas minoristas para captar las remesas enviadas por los cubanos que viven en el extranjero, en especial en Estados Unidos. Ese fue otro argumento para prohibir en su momento la venta libre de equipos electrodomésticos y la estancia de cubanos en los hoteles para extranjeros.