Publicado 25/09/2016 08:00

Chespirito, fin de emisión

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   CIUDAD DE MÉXICO, 25 Sep. (Notimérica) -

   El nombre de Roberto Gómez Bolaños está íntimamente ligado con el de Chespirito, uno de los personajes mexicanos más universales que marcó la infancia de millones de personas con la creación de su álter ego, cuya serie de televisión dejó de emitirse el 25 de septiembre de 1995.

   Gómez Bolaños se puso en la piel de El Chavo del Ocho y el Chapulín Colorado en innumerables ocasiones, encumbrándole en la televisión mexicana donde fue actor, dramaturgo, guionista y compositor, entre muchas otras ramas de la interpretación y la producción. Es así como, aparte de sus personajes más populares, tuvo la oportunidad de presentar a el Chómpiras, el Doctor Chapatín y Chaparrón Bonaparte.

   A pesar de haberse dedicado casi por completo a la pequeña pantalla, también llegó a interpretar personajes cinematográficos en 'El Chanfle' (1979) y su secuela, en el mismo año; y 'Don Ratón y don Ratero', que la presentó a los espectadores en 1983.

   En cuanto a la serie televisiva que lleva su nombre, caben destacar dos etapas especialmente marcadas en su historia. La primera, que abarca desde 1970 a 1973, contó con las actuaciones del propio Chespirito, Rubén Aguirre 'El Shory' (como el profesor Rubén Aguirre Jirafales), Ramón Valdés (como el Ingeniebrio) y María Antonieta de las Nieves, en la piel de La Mococha Pechocha.

   Al principio, sus intervenciones se realizaban dentro del programa 'Sábados de la Fortuna' --emitido por la Televisión Independiente de México (TIM)-- para pasar a convertirse en una serie de televisión compuesta por diferentes capítulos que se emitían semanalmente.

   Uno de los puntos de inflexión de esta primera época se produjo con el comienzo de 'Los Supergenios de la Mesa Cuadrada', donde la burlas y los chistes hacia diferentes personalidades del medio artístico hicieron que a mediados de 1971 dejara de realizarse.

   Así, el programa continuó con diferentes segmentos cómicos como 'Los Caquitos' o 'Los Chifladitos' pero, a mediados de 1973 se canceló y se produjeron las series independientes de 'El Chapulín Colorado' y 'El Chavo', dejando como anexos los demás hasta 1973, cuando parecía haberse producido su final definitivo.

   

   Pero en 1980 se decidió retomar el concepto de la serie original de la década anterior, por lo que se crearon nuevos personajes complementarios y se añadieron varias parodias de 'Chaplin' y 'El Gordo y el Flaco' entre los sketches del programa.

   Sin embargo, en estas nuevas emisiones faltaban dos personajes primordiales junto a Chespirito: Carlos Villagrán y Ramón Valdés, que habían presentado sus respectivas renuncias antes del comienzo de la segunda tanda de capítulos. Fue en 1981 cuando Valdés volvió a formar parte del elenco como Don Ramón y Súper Sam en sus diversos gags.

   

   Su interpretación no fue duradera debido a que tuvo que volver a dejar la serie por problemas de salud. Asimismo, hubo personajes concurrentes entre los 693 capítulos que conforman ambos períodos, como el hijo de Chespirito, Roberto Gómez Fernández, Ramiro Orcí o el 'Chato' Padilla.

   Conforme aumentó la audiencia del sketch de 'Los Caquitos', disminuía el interés del público por las apariciones del Chavo del Ocho y el Chapulín Colorado en favor de una trama novedosa de los primeros frente a las repeticiones y regrabaciones de los segundos.

   La muerte de Ramón Valdés en 1988, víctima de un cáncer de estómago, deterioró de forma clara al resto del elenco formado por Édgar Vívar, Angelines Fernández y Horacio Gómez Bolaños, entre otros. Así poco tiempo se extensión le quedaba a Chespirito, ya que también se tuvo en cuenta la edad de su protagonista, de 63 años, que ejercía el papel de un niño de 8.

   Por tanto, 'Los Caquitos' recibieron mayor atención que el resto del programa y poco a poco fueron desapareciendo las grabaciones de El Chavo y El Chapulín Colorado, entre 1992 y 1993. El resto de actores se fueron retirando por problemas de salud (como Édgar Vivar, que sufría obesidad), mientras que otros fallecieron.

   Ya en septiembre de 1995, Televisa retiró el conjunto de series de comedia de su horario estelar, por lo que quedaron reservadas a los fines de semana. Ante esta decisión, y debido al cambio tan brusco, Gómez Bolaños decidió acabar con su programa y retirarlo de la parrilla televisiva a pocos días de cumplir un cuarto de siglo de permanencia.

   Terminaba así una época marcada por la originalidad del comediante y sus compañeros, las risas más abundantes de los espectadores y el puñado de personajes míticos de la televisión mexicana que traspasó fronteras y llegó a casi todos los países de Latinoamérica.