Por Patrick Johnston
BRASILIA, 24 jun, 24 Jun. (Reuters/EP) -
- Los toques y trucos regresaron junto con los goles, pero ni la magia de Neymar pudo ocultar los defectos defensivos que dificultan el intento de Brasil de conquistar su sexta Copa del Mundo, esta vez como local.
El delantero del Barcelona fue el centro de atención mientras se deleitaba ante la frágil defensa de Camerún para anotar dos goles en la victoria 4-1 del lunes, que puso a los anfitriones en octavos de final, donde enfrentarán a Chile.
Sus pases hacia atrás, toques hábiles y travesuras conquistaron a la multitud en los 70 minutos que estuvo en el campo, en los que tuvo un apoyo ferviente del público que lo ovacionó de pie en el estadio Nacional de Brasilia.
La afición local llegó para ver una victoria con estilo, algo que le fue negado por una fallida línea de ataque y un esfuerzo defensivo sólido de México en el empate previo por el Grupo A, que planteó interrogantes sobre el nivel del favorito del torneo.
El entrenador de Brasil Luiz Felipe Scolari alineó al mismo equipo que remontó el marcador para vencer a Croacia 3-1 en el partido inaugural y abrumó a los africanos, ya eliminados. Pero habrá que ver si un desarrollo similar ante Chile, un equipo de mayor potencia ofensiva, no termina con un resultado diferente.
Los centrales Thiago Silva y David Luiz, y el mediocampista de contención Luiz Gustavo eran los únicos que protegían al portero Julio Cesar por largos períodos, mientras los otros siete jugadores brasileños salían disparado hacia adelante buscando goles. Otra vez, eso podría ser fatal ante Chile.
Incluso Luiz Gustavo abandonó su puesto a los 17 minutos para aparecer por la izquierda y dar el pase para el gol de Neymar. Pero este despliegue tuvo defectos ante un equipo que sólo mostró peleas internas en sus dos derrotas iniciales.
La confianza de Camerún creció a medida que encontraba espacios frecuentes alrededor del área penal de Brasil y amenazó varias veces con el empate antes de que Joel Matip quedara libre por la izquierda y lo anotara a los 26 minutos.
El gol llegó luego de que Allan Nyom escapara una vez más de la atención del defensor Dani Alves, con Benjamin Moukandjo disfrutando de un espacio similar por la izquierda detrás de Marcelo en el primer tiempo.
Camerún hubiera tenido más oportunidades creativas con una línea de ataque más sólida. Brasil, sin embargo, no tuvo que preguntarse sobre lo que pasaría.
El pentacampeón mundial tiene en Neymar a un delantero confiable que carga con el peso de las expectativas de todo un país y no dejó pasar las oportunidades dadas por el rival.
POBRE DESPEJE
Después de un mal despeje defensivo, Marcelo le dio el balón a Neymar para que el local quede otra vez arriba en el marcador y la fiesta en las gradas regresara antes del mediotiempo.
El defensor David Luiz, otro que adora abrirse hacia adelante, habilitó un balón cruzado desde la izquierda para que Fred marcara de cabeza el tercer gol.
Scolari ordenó el ingreso en el entretiempo de Fernandinho por Paulinho, que nuevamente decepcionó, y Dani Alves fue más precavido en la segunda mitad, pero las oportunidades fluyeron para los africanos mientras los brasileños erraban sus pases.
Fernandinho impresionó, vinculó bien el juego y participó en el final de otra jugada de ataque en el área penal de Camerún que completó la goleada en los últimos compases del encuentro.
El resultado dejó a los aficionados felices pero quedaron preguntas inevitables sobre la frágil defensa del anfitrión.
"Tuvimos un pequeño problema en la primera mitad cuando Oscar se incorporó al ataque", dijo Scolari, y agregó que el problema fue resuelto en el entretiempo.
"No tengo una gota de miedo respecto a la defensa, que es espectacular. Como es natural, puede ser superada como cualquier defensa", agregó en una señal de tranquilidad pensando en el partido del sábado.