SANTIAGO, 21 abr, 21 Abr. (Reuters/EP) -
- La chilena Embotelladora Andina, el tercer mayor distribuidor de Coca-Cola en América Latina, prevé que sus ventas se disparen durante el Mundial de fútbol en Brasil, pero teme que nuevos impuestos en Chile opaquen sus resultados.
Andina -que tiene unidades en Chile, Argentina, Brasil y Paraguay- potenció el año pasado su operación en el gigante sudamericano con la adquisición de Companhia de Bebidas Ipiranga, de fuerte presencia en los populosos estados de Sao Paulo y Minas Gerais.
"Durante los meses en que se juegan los partidos, la estadística dice que normalmente el volumen (de ventas) se incrementa en un 50 por ciento con respecto al incremento normal, esto implica crecer un 7-8 por ciento", dijo el vicepresidente ejecutivo de Andina, Miguel Angel Peirano.
"Brasil es un país muy futbolero, por lo cual se supone que el impacto debiera ser mayor", agregó el ejecutivo a periodistas tras a la junta anual de accionistas de la firma.
La empresa ya contaba con operaciones en el estado brasileño de Rio de Janeiro, con lo que actualmente cubre las tres principales zonas urbanas del país.
La efervescencia que genera la llegada del Mundial contrasta con el temor de la compañía ante la inminente aprobación en Chile de nuevos impuestos a las bebidas con azúcar.
"Nosotros creemos que es muy arbitrario, que es discriminatorio", dijo José Luis Solorzano, gerente general de la unidad local de Andina, quien no descartó ir a la justicia por considerar que es una medida "inconstitucional".
El Gobierno de la socialista Michelle Bachelet, que asumió el mes pasado, presentó un amplio proyecto de reforma tributaria que incluye un nuevo tributo a las bebidas azucaradas, en un intento por frenar la creciente obesidad en el país.