LA PAZ (Reuters) - La selección boliviana de fútbol revivió el martes en la eliminatoria sudamericana al golear 4-1 como local a Uruguay, con tres anotaciones del debutante Carlos Saucedo que le permiten mantener en pie las escasas posibilidades de llegar a la Copa del Mundo 2014.
Saucedo, el máximo goleador actual del torneo local, anotó a los seis, 50 y 55 minutos y Gualberto Mojica contribuyó con otra anotación a los 26, en la segunda victoria boliviana en el torneo, que abría así su segunda rueda.
El experimentado Luis Suárez descontó para el visitante a los 81 minutos, apenas un tanto de honor para una selección celeste que de gran favorita inicial termina el año competitivo sumida en grandes dudas tras sufrir tres derrotas y lograr apenas un empate en las cuatro últimas jornadas.
Con el triunfo Bolivia suma ocho puntos, cuatro menos que Uruguay.
Bolivia sacó provecho de la lentitud y extrema cautela iniciales del cuadro uruguayo para imponer su iniciativa ofensiva con toques rápidos y cargas en bloque que no demoraron en dar fruto.
El técnico de Bolivia, Xabier Azkargorta, destacó tanto la efectividad de Saucedo como el orden colectivo como claves de la victoria verde, la primera desde que el vasco asumió el mando a mediados de año.
"Creo que el equipo ha jugado muy bien, ha tenido una consistencia y un orden y no ha habido esa ansiedad y esa angustia que hubo (...) contra Perú", dijo en conferencia de prensa tras el choque.
"Sinceramente no me gustaría matizar en sólo un jugador la victoria de un equipo, hoy hemos sido un equipo, la defensa también ha sido brillante", agregó el técnico, remarcando que el resultado del martes era apenas un pequeño paso hacia el distante Brasil.
RAPIDA VENTAJA
El primer gol boliviano llegó en un tiro de esquina servido desde el lado derecho, que el astro local Marcelo Martins prolongó para que Saucedo anotara casi a ras del piso y desde el interior del área menor.
Perdida su marca en el mediocampo, Uruguay acentuó su repliegue, apenas contraatacando con largos pases en profundidad que Luis Suárez o alternativamente Diego Forlán culminaban con intrascendentes remates de larga distancia.
A los 26 minutos, Mojica aumentó la cuenta con un potente tiro libre de 25 metros que sorprendió al arquero Fernando Muslera, quien aparentemente esperaba un centro al área.
El técnico uruguayo Oscar Tabárez hizo ingresar al goleador Edinson Cavani y al mediocampista Nicolás Lodeiro a los 35 minutos, pero sus cambios no lograron dar orden a las filas de su desorientado equipo.
En el segundo tiempo, Uruguay no tuvo otra opción que lanzarse al ataque, pero dejó vacíos en su zaga por los que pagó caro con otros dos goles a los 50 y 55 minutos, marcados por el mismo Saucedo, a quien el técnico Xabier Azkargorta apostó tras el pobre empate como local 1-1 de la semana pasada ante Perú.
Saucedo, del club San José de la ciudad altiplánica de Oruro, conectó de carrera y con el pie derecho un tiro libre de Mojica para el 3-0, y aumentó luego la cuenta al cabecear un balón servido desde la izquierda tras una vistosa jugada de toque del seleccionado verde.
Bolivia mantuvo la presión ofensiva hasta el final ante una selección uruguaya que lucía tan sorprendida como impotente hasta que, cerca del cierre y cuando ya parecía fundida por el desastre en la altura, logró el descuento con un gol de tiro libre de Suárez, desde 20 metros de frente al arco.
Los celestes estuvieron a punto de un anotar un segundo gol de descuento en los tramos finales, cuando Bolivia perdió también claras opciones de aumentar la goleada.
Tabárez reconoció la superioridad boliviana y reconoció los errores defensivos de su equipo, algo que lo preocupó de cara a lo que queda en la eliminatoria.
"Tenemos todavía posibilidades (de clasificación). Si Bolivia con cinco puntos pensaba ir al Mundial, y va a seguir pensando con esta victoria, ¿por qué nosotros que tenemos 12 no lo podemos hacer?", desafió.
Afirmó que en un partido que "Bolivia ganó bien, lo planteó bien", su equipo tal vez no mereció sufrir una goleada.
"Cometimos errores que nos hacen pensar que no estamos bien, pero también hicimos cosas que nos hacen pensar que no estamos mal", agregó el "maestro" Tabárez.