ASUNCION (Reuters) - El entrenador del club paraguayo en el que juega Salvador Cabañas -quien volvió al fútbol luego de recibir un disparo en la cabeza- renunció el miércoles, por lo que consideró presiones para incluir entre los titulares del equipo al delantero.
Cabañas tuvo una asombrosa recuperación luego de estar al borde de la muerte en enero del 2010, por un disparo que siguió a una discusión en el bar de una discoteca de Ciudad de México, donde era un ídolo del club América.
El futbolista reapareció este año como profesional en el 12 de octubre, un club de tercera división de su ciudad natal en el que se inició como jugador. Pero una serie de derrotas desataron una crisis y la salida del entrenador, Rolando Chilavert.
"Por compasión no se puede seguir en el fútbol (...) su nivel futbolístico no alcanza", dijo Chilavert a la radio Caritas de Asunción.
"Le tengo un gran afecto pero hay que enfrentar la realidad (...) Yo quería salir campeón con el 12 de Octubre sin Salvador, y ellos (los dirigentes) querían salir campeones con Salvador", dijo el técnico al diario Ultima Hora.
El presidente del club salió al paso de las declaraciones del DT. "Cabañas hizo la pretemporada y jamás impusimos nada al cuerpo técnico. El jugó varias veces y ganamos tres partidos con él, solo perdimos uno, y cuando él no jugó también perdimos", dijo Luis Salinas.
Cabañas, quien aún tiene alojada la bala en la cabeza pues los médicos decidieron no removerla, tiene contrato con el equipo hasta octubre del 2012 con la opción de renovarlo en caso de conseguir un ascenso.
El 12 de octubre marcha segundo en el torneo de la tercera división del balompié paraguayo, a cinco puntos del líder.