Por Claudio Cerda
SANTIAGO (Reuters/EP) - Christian Rojas se prepara para debutar como árbitro en la liga de fútbol chileno que comienza el fin de semana, pero la sensación antes de un nuevo torneo es conocida para él, ya que jugó varias temporadas como defensor en el local Cobresal antes de abandonar la actividad.
Rojas, quien desarrolló toda su carrera en Cobresal, un equipo del norte de Chile, concretó su ascenso esta temporada a la categoría de honor tras haber dirigido en segunda división durante los últimos años.
El ex defensor jugó por última vez en el 2001. Rojas debió abandonar la actividad a los 25 años tras una grave lesión de rodilla, problema físico que no le impidió optar por el arbitraje como profesión tras su retiro.
"Esto siempre me llamó la atención, pero sufrí dos operaciones a la rodilla derecha (rotura de ligamentos cruzados) que me complicaban para seguir jugando. Esta opción del arbitraje surgió espontáneamente y hasta ahora creo que ha sido la más acertada", dijo Rojas a Reuters.
La decisión de Rojas de dedicarse al arbitraje sigue una línea que no tiene demasiados antecedentes en la actividad.
Domingo Massaro es el último futbolista chileno que optó por impartir justicia dentro del campo de juego tras colgar los botines.
Massaro, quien incluso visitó la camiseta de Chile en los Juegos Olímpicos de 1952, cumplió una brillante carrera que le llevó a dirigir la final de la Copa Intercontinental de 1969, dos años antes de su retiro como juez.
En Uruguay, Darío Ubriaco fue designado árbitro de primera en 2004 y cuatro años después alcanzó la categoría internacional. Ubriaco debutó como jugador a los 18 años con el Central Español de su país en 1990 e integró un seleccionado sub-20 en un sudamericano.
Rojas, quien aguarda superar una molestia en la rodilla derecha para debutar en el Torneo Apertura chileno, considera que se encuentra capacitado para dirigir a Cobresal, aunque espera que surjan dudas por su objetividad y críticas más severas si comete errores.
"Yo soy un profesional del fútbol y me gustaría arbitrarles, pero son los profesores quienes decidirán lo más conveniente", dijo Rojas, de 34 años.
"En el fútbol todos nos conocemos y actualmente en el torneo hay jugadores y técnicos que fueron compañeros míos, y bajo ese punto de vista tendría que arbitrarle sólo a algunos equipos y esa no es la idea", aseveró el ex defensor.
Rojas afirmó además que pese a que los juicios pueden ser más duros por su pasado como jugador, como ocurrió en segunda división, su experiencia como futbolista le otorga ventajas.
"El trato con los jugadores es muy bueno (...) Además por haber estado en muchos camarines y por situaciones que pasan en el campo de juego y una con una mirada puede percibirlos de una manera diferente", agregó.