(Reuters) - El Inter de Milán deberá jugar su próximo partido de la Serie A en su campo sin público en una de las gradas como sanción por los cánticos racistas de sus aficionados el sábado, decidieron el martes las autoridades.
La prohibición de espectadores, y una multa de 15.000 euros, fueron impuestas porque la afición entonó cánticos racistas y señaló con punteros láser al árbitro y a los jugadores de la Juventus, dijo la Serie A en un comunicado.
La afición del Inter también desplegó una pancarta insultando al entrenador rival Antonio Conte, dijo el comunicado.
Medios italianos señalaron que los centrocampistas de la Juve Paul Pogba y Kwadwo Asamoah fueron los objetivos de los cánticos racistas durante el partido en Milán, que terminó 1-1.
Una de las gradas de San Siro se cerrará para el próximo partido en casa del equipo, contra la Fiorentina el 26 de septiembre.