BARCELONA, 2 Mar. (EUROPA PRESS) -
El delantero argentino Leo Messi manifestó esta tarde que es preferible no realizar más declaraciones públicas sobre los comportamientos racistas de aficionados en los estadios porque considera que "si se le sigue dando importancia, va a seguir pasando", aunque condenó estas actitudes.
Messi se reincorporó a los entrenamientos del Barcelona junto al resto de internacionales del equipo a excepción del brasileño José Edmílson, que volverá mañana debido a los problemas para regresar de Rusia, y se mostró satisfecho por su actuación, con gol incluido, en el Croacia-Argentina, pese a lamentar la derrota (3-2).
El jugador argentino estaba "feliz" por haber marcado su primer gol con la selección absoluta de Argentina y dijo haberse sentido "muy cómodo" jugando al lado de Juan Román Riquelme, aunque lamentó la derrota y apuntó que la albiceleste tiene tiempo para "corregir muchas cosas y seguir mejorando" hasta el Mundial de Alemania.
Considerado por algunos como sucesor de Diego Armando Maradona, incluido el mítico ex jugador argentino, Messi mantiene la calma y dice sentirse "uno más" en la selección argentina, en la que aseguró que actualmente, pese a la multitud de elogios, le tratan "como siempre, como el primer día que llegué".
Messi, además, se mostró exigente consigo mismo al referirse a su última actuación con el Barcelona en el partido de la pasada jornada en el campo del Zaragoza (0-2), donde fue sustituido en el segundo tiempo por Henrik Larsson. "No me molestó el cambio, sino mi actuación", afirmó el argentino.
Ahora, el jugador apodado en su país como 'La pulga atómica', un apelativo que "ni me va ni me viene", dijo, afronta el partido ante el Deportivo sin ganas de revancha, pese a que fue uno de los clubes que trató de vetarle en la Liga, y no le preocupan las críticas que ha recibido desde el Chelsea, al que se enfrentará el martes.
El argentino no quiso polemizar con el técnico José Mourinho o el defensa Asier Del Horno, expulsado en Londres por una entrada sobre Messi. "Sé que me pegó y tengo la marca, pero cada uno piensa como piensa y no quiero entrar en eso. No sé si es una estrategia de ellos, pero a mí no me afecta", comentó.
Finalmente, se refirió al centrocampista del Arsenal Cesc Fàbregas, con el que coincidió en las categorías inferiores del Barcelona, y elogió sus cualidades y expresó su respet por la decisión que pueda tomar de cara al futuro, sea cual sea, incluso si se marcha al Real Madrid.
"Ojalá que esté donde mejor se sienta y donde quiera porque es un gran jugador, una gran persona y tiene que estar donde le guste. Si es en el Real Madrid, que sea allí", dijo Messi, que luego aseveró que tampoco vería mal que regresara al Barcelona.