CIUDAD DE MÉXICO, 6 Jul. (Reuters/Notimérica) -
Las selecciones de México y Estados Unidos se volverán a ver las caras este domingo por quinta ocasión en una final de la Copa de Oro para definir al campeón de la Concacaf, pero ambos conjuntos tendrán que mejorar sustancialmente su rendimiento tras los sustos que pasaron ante rivales más débiles en las eliminatorias previas.
En la semifinal, México apenas pudo vencer 1-0 a Haití con un penalti de Raúl Jiménez en el tiempo extra, mientras que Estados Unidos solo pudo vencer por la mínima diferencia a Curazao en cuartos de final y posteriormente derrotó 3-1 a Jamaica para alcanzar la final.
"Creo que en el fútbol ya no hay gigantes, hay que jugar los partidos porque en nuestra historia sabemos que hemos ganado bastantes ediciones de Copa Oro, pero eso no nos va a llevar a ganar el domingo", señaló el defensor mexicano Carlos Salcedo.
El "Tri" es el máximo ganador de la Copa de Oro con siete títulos (1993, 1996, 1998, 2003, 2009, 2011 y 2015).
"Los rivales que hemos enfrentado no han sido nada sencillos, pero afortunadamente el equipo ha tenido esa fortaleza para encararlos y ganar", señaló por su parte el mediocampista Luis Montes.
Por su parte, Estados Unidos quiere alzar la Copa para empatar a su clásico rival como los máximos ganadores del torneo de la Concacaf tras conquistarlo en 1991, 2002, 2005, 2007, 2013 y 2017.
"Creo que se trata de una rivalidad deportiva grandiosa en la que todo puede pasar, pero que estoy convencido que buscaremos de nuevo hacer nuestro mejor fútbol y luchar desde el inicio por el triunfo. Todo el equipo está preparado y mentalizado para el duelo", indicó el mediocampista estadounidense Christian Pulisic.