Actualizado 05/05/2014 15:33

MUNDIAL-Alexis Sánchez será el estandarte de Chile en Brasil

Por Iain Rogers

MADRID, 5 mayo, 5 May. (Reuters/EP) -

- El fútbol tiene muchos ejemplos de jugadores que han dejado atrás la pobreza de sus años de formación para convertirse en figuras reconocidas a nivel mundial, pero el delantero chileno Alexis Sánchez puede decir que el suyo es especialmente paradigmático.

Nacido en Tocopilla, en la región minera del norte del país sudamericano, Sánchez casi no conoció a su padre y fue criado por su madre, quien trabajaba como empleada de limpieza en la escuela de su hijo.

Como muchos de sus amigos de Tocopilla, una sombría ciudad dominada por una gigantesca planta de energía y una procesadora de salitre, lo único que Sánchez quería era jugar al fútbol, pero tuvo que trabajar limpiando automóviles mientras estudiaba para colaborar con las finanzas de la familia.

Mostró un gran talento desde pequeño para ganarse el apodo de "El Niño Maravilla", y rápidamente se dio cuenta que el fútbol sería una forma de ayudar a su madre y al resto de la familia.

"Cuando era pequeño mi madre trabajaba en el colegio al que yo iba y a mí no me gustaba que mi madre trabajara", dijo Sánchez, delantero del Barcelona y uno de los futbolistas mejor pagados del mundo, en un filme de la cadena HBO sobre su vida.

"Cuando mi madre estaba limpiando los lugares de la escuela yo me escondía para no verla a ella limpiando", agregó el atacante de 25 años.

Sánchez es un futbolista de una velocidad excepcional y un notable control del balón, que hace estragos cuando encara defensores por la derecha, ya sea con diagonales hacia el centro para patear al arco o llegando hasta la línea de fondo para habilitar compañeros con un centro.

"Yo quería ser jugador de fútbol y lo logré, pero de no haber sido jugador de fútbol habría trabajado en la mina, u otra cosa sacrificada, pero habría hecho algo. Yo quería triunfar en el fútbol para ayudar a mi familia y a la gente de Tocopilla".

Sánchez debutó profesionalmente a los 16 años en Cobreloa antes de que Udinese se interesara en él. Originalmente, el club de la Serie A lo prestó al Colo Colo de Chile y luego un año al River Plate argentino, donde fue dirigido por el actual entrenador del Atlético de Madrid, Diego Simeone.

LLEGADA AL BARCA

El Udinese finalmente decidió usarlo cuando Sánchez ya tenía 19 años y, tras un par de temporadas de adaptación a la vida en Europa, explotó durante la temporada 2010-11, lo que llevó al poderoso Barcelona a pagar unos 36 millones de dólares para quedarse con su ficha.

Pero nunca logró conquistar del todo a los difíciles hinchas del conjunto catalán. Pese a que tuvo partidos brillantes, como cuando marcó un gol inolvidable en el clásico contra el Real Madrid por la liga en octubre, le ha faltado consistencia para convertirse en ídolo.

A diferencia de lo que ocurre en el Barca, donde debe competir con Neymar y Pedro para acompañar a Lionel Messi en el ataque, en la "Roja" es el líder indiscutido de la delantera y suma 22 goles en 65 partidos internacionales.

Sánchez cree que se desarrolló como persona y como futbolista en el Mundial 2010 y se muestra muy confiado de cara a Brasil.

Chile quedó sembrado en el Grupo B, en el que se medirá con el campeón del mundo España, el finalista del Mundial 2010 Holanda, y Australia.

"Creo que Chile va a ganar el Mundial", dijo Sánchez a HBO. "Si no lo creyera, me quedaría en casa y lo vería por televisión", agregó.