Por Javier Leira
SAO PAULO, 1 jul, 1 Jul. (Reuters/EP) -
- Hay muchas formas de explicar un gol, pero el arquero argentino Sergio Romero pareció ir más allá, encontrando un argumento muy original.
"El enano desequilibró y el flaquito estaba en el lugar justo para embocarla", sostuvo Romero a periodistas, en una particular forma de decir qué fue lo que hizo Argentina para ganarle a Suiza.
Tras 118 minutos de embates ofensivos, forjados con más intención que buenas ideas, Lionel Messi (alias el "enano") eludió a varios rivales en una jugada de izquierda a derecha y le dio un preciso pase gol a Angel Di María (el flaquito).
El extremo del Real Madrid, que había pateado sin suerte al arco una decena de veces hasta el momento, remató cruzado para doblegar la estirada del arquero suizo Diego Benaglio, un muro infranqueable hasta ese momento para el equipo sudamericano.
Argentina tuvo un buen desempeño en lo táctico, pero solamente algunos momentos de lucidez en el juego, y estuvo a punto de tener que definir el partido por penales.
"Fue un partido duro, muy trabado, en el cual ni nosotros ni ellos regalamos nada", destacó el golero del Mónaco de Francia.
"Lo rescatable es que Argentina demostró, una vez más, que no se entrega nunca y lucha hasta el final", agregó.