Por Mark Gleeson
SALVADOR, Brasil, 5 jul, 5 Jul. (Reuters/EP) -
- Bélgica terminó su campaña mundialista el sábado con la sensación de que le quedan asuntos pendientes pero también habiendo estableciendo un indicador para futuros torneos de fútbol, en particular la próxima Eurocopa del 2016 y el Mundial del 2018.
Su caída ante Argentina por 1-0 fue una experiencia desgarradora pero con un plantel relativamente joven -el tercero más joven de las 32 selecciones del Mundial con un promedio de edad de 25,5 años- Bélgica tiene el potencial para convertirse en una escuadra a ser tenida en cuenta.
"Estamos inconsolables pero podemos mirar hacia atrás a un buen torneo", dijo el técnico Marc Wilmots momentos después del pitazo que puso fin a su participación en Brasil.
Su presencia en el Mundial terminó con más de una década de ausencia en un torneo importante para Bélgica y habrá dado al plantel una gran dosis de confianza.
Pero los "Diablos Rojos" necesitan reflexionar sobre un torneo en Brasil donde hicieron el trabajo duro de sus rivales por momentos y hallar la razón por la que su figura Eden Hazard no brilló.
Solo se vieron chispas del potencial del habilidoso mediocampista, cuyo rol por la izquierda fue eclipsado por la excepcional eficacia de Kevin de Bruyne en la derecha.
Además de De Bruyne, destacaron otras impresionantes individualidades.
La actitud calma, firme y práctica de Alex Witsel en el mediocampo aumentó su reputación y el capitán Vincent Kompany se mostró como un excepcional líder pese a una lesión en la ingle.
El arquero Thibaut Courtois figura también entre las varias razones del optimismo belga respecto al futuro.
"Podemos irnos con la cabeza en alto y ahora pensar en el futuro", dijo Courtois a periodistas.
La sorpresiva elección de Wilmots del adolescente Divock Origi para el torneo probó haber sido una inspiración. El sábado, el jugador de 19 años se convirtió en el futbolista titular más joven en un partido de cuartos de final desde Pelé en 1958.
"Hicimos lo mejor y eso es lo más importante. Nuestro joven equipo sabe que habrá más Mundiales. Tal vez en cuatro años en Rusia tendremos una mejor oportunidad", afirmó Kompany.