Publicado 05/05/2014 15:31

MUNDIAL-Brasil, el gran favorito que busca no sucumbir a la presión

Por Andrew Downie

SAO PAULO, 5 mayo, 5 May. (Reuters/EP) -

- Con una multitud apasionada dando todo su respaldo, un experimentado entrenador a la cabeza y un equipo asentado que disfruta de un gran presente, Brasil es el gran favorito para levantar su sexta Copa del Mundo de fútbol a mediados de julio.

Después de su derrota en los cuartos de final de Sudáfrica 2010 ante Holanda, el técnico Dunga fue reemplazado por Mano Menezes, quien rearmó al equipo e hizo debutar en la "verdeamarela" a jugadores jóvenes como Neymar, Oscar, Paulinho y Fernandinho.

Pero los resultados no acompañaron a Menezes, quien fue reemplazado por Luiz Felipe Scolari en diciembre de 2012. El hombre que guió a Brasil a su quinta Copa del Mundo en el 2002 agregó fiereza y orden táctico a un equipo con indiscutible calidad.

Scolari recuperó la confianza del equipo y de los aficionados en sólo seis meses y transformó el grupo de jugadores inexpertos de Menezes en un conjunto sólido que parece ser capaz de lograr grandes cosas.

La manera en que Brasil ganó la Copa Confederaciones el año pasado, venciendo a Uruguay e Italia en su camino a derrotar 3-0 al campeón mundial España en la final, fue inolvidable y pareció despertar a un gigante dormido por más de una década.

Brasil ha ganado siete partidos consecutivos y 13 de sus últimos 14, por lo que los aficionados ya no se preguntan si podrán celebrar el título mundial el 13 de julio, lo esperan.

Sin embargo, la mayor preocupación es si Brasil ha alcanzado su mejor nivel demasiado pronto.

Ningún equipo ha ganado la Copa del Mundo después de levantar la Copa Confederaciones un año antes. Brasil obtuvo el torneo en 2005 y 2009, pero luego sufrió duras decepciones.

Otra tema es cómo responderán sus jóvenes futbolistas a la presión de jugar un Mundial en casa frente a hinchas apasionados y con hambre de éxito.

Si bien cada miembro de la lista de 23 jugadores tiene experiencia en el competitivo fútbol de Europa, pocos han debido lidiar con este nivel de expectativas sobre sus hombros.

"Es diferente", dijo Juninho, un ex mediocampista de Vasco da Gama, Atlético Madrid y Middlesborough que ganó con Brasil el Mundial de 2002 en Corea del Sur y Japón. "Hay mucha más presión. Representar a tu país es más importante".

La vez anterior que Brasil fue sede de la Copa del Mundo en 1950, el conjunto local perdió sorpresivamente 2-1 ante Uruguay en el recordado "Maracanazo".

CICATRICES

Esa derrota dejó cicatrices en el país y la enorme presión de tener que levantar finalmente el trofeo en el estadio Maracaná podría ser un problema si Brasil no protagoniza un buen debut en el Mundial ante Croacia. El local enfrentará luego a México y Camerún.

Pero hasta ahora, por lo menos, los jugadores no parecen intimidados.

La buena racha los ha llenado de confianza, y con razón: Brasil anotó 25 goles en sus últimos siete partidos, en los que recibió sólo dos. De estos siete rivales, cinco están clasificados para el Mundial.

"Hemos terminado esta fase de preparación a la perfección", dijo el capitán Thiago Silva después del último amistoso, una goleada 5-0 ante Sudáfrica en marzo.

"Ganamos invictos la Copa Confederaciones (...) y estoy seguro de que haremos un gran trabajo en la Copa del Mundo", agregó.

Scolari ha declarado en repetidas ocasiones que Brasil ganará la Copa del Mundo y las casas de apuestas más grandes del mundo dan al anfitrión como favorito.

Ahora, una nación entera aguarda que el balón empiece a rodar.