Por Eduardo Simões
SAO PAULO, 6 jun, 7 Jun. (Reuters/EP) -
- Los futbolistas de la selección brasileña admitieron que jugaron un mal primer tiempo el viernes en el triunfo 1-0 ante Serbia, en el último amistoso previo al Mundial, y reconocieron la necesidad de hacer "ajustes" antes del debut ante Croacia el próximo jueves.
El fútbol mostrado por Brasil en la primera etapa del partido fue tan flojo que los hinchas que llenaron el estadio Morumbi, en Sao Paulo, abuchearon al equipo al término de los primeros 45 minutos, en los cuales Serbia tuvo varias ocasiones de abrir el marcador.
"El primer tiempo estuvo por debajo de lo que la gente puede esperar", admitió el capitán brasileño Thiago Silva. "Los hinchas tienen todo el derecho de reclamar, así como los jugadores estábamos reclamando dentro del campo", agregó.
Serbia presentó una propuesta principalmente defensiva en el amistoso. Además, según los jugadores brasileños, también los complicó el estado del césped del Morumbi, castigado por un día de lluvia constante en Sao Paulo.
"Hay que ajustar algunas cosas. Infelizmente, hoy tuvimos algunos errores, el campo no estaba muy bien y el equipo de ellos se defendió todo el partido", declaró el delantero Hulk.
El juego de Brasil mejoró en el segundo tiempo, cuando los serbios no lograron sostener la intensidad en la marcación. Los cambios realizados por el entrenador brasileño Luiz Felipe Scolari, entre ellos el ingreso de Willian en lugar de Oscar, también surtieron efecto.
"Fue difícil encontrar espacios", admitió Willian. "En el segundo tiempo se pudieron crear un poco más de jugadas", agregó.
Scolari también reconoció la mejora del equipo en la segunda mitad y señaló que la marca de Brasil sobre la salida del equipo rival mejoró después del descanso.
"(Los jugadores) hicieron una marcación más o menos buena en el primer tiempo, pero después mejoraron en la presión. No es fácil hacer esa marcación los 90 minutos", dijo el técnico en una rueda de prensa.
Scolari señaló que para el debut mundialista ante Croacia, los jugadores brasileños estarán en condiciones físicas aún mejores, y también indicó que el equipo tiene que saber jugar con pocos espacios, ya que normalmente enfrenta rivales que juegan a la defensiva, como lo hicieron Panamá y Serbia en los últimos amistosos.
"Con Serbia los dos delanteros jugaron casi de mediocampistas. El espacio muy pequeño dificulta mucho las cosas. Si uno no se mueve bien y no da pases precisos, va a sufrir un contraataque", dijo.
Brasil jugará el partido inaugural del Mundial frente a Croacia en el estadio Arena Corinthians, también ubicado en la ciudad de Sao Paulo.