Por Mark Gleeson
6 MAYO, 6 May. (Reuters/EP) -
- Didier Drogba jugará su último gran torneo con la camiseta de Costa de Marfil en Brasil, donde la nación africana espera que una nueva generación de delanteros pueda llevarla más allá de la primera ronda en una Copa del Mundo.
El atacante de 36 años ha sido un talismán para su país, que lo tuvo en los últimos dos mundiales y en cinco ediciones seguidas de la Copa Africana de Naciones, y se encuentra en el ocaso de su carrera luego de anotar 61 goles en 99 partidos.
Drogba ya no tiene un puesto seguro en la alineación inicial, donde los marfileños pueden recurrir a Wilfried Bony, Seydou Doumbia o Lacina Traore para que lideren el ataque.
Salomon Kalou y Gervinho también se convirtieron en otras opciones a medida que la dependencia de Drogba se disipaba en los últimos 18 meses.
En Brasil, el entrenador Sabri Lamouchi espera una transición sin inconvenientes desde una generación de jugadores carismáticos como Kolo Touré, su hermano Yaya y el ocasional capitán Didier Zokora hacia un grupo de talentos emergentes.
"Un equipo que no cambia no evoluciona", dijo Lamouchi en una entrevista reciente con Reuters.
El entrenador asegura que los marfileños se fijaron como meta avanzar más allá de la fase inicial, donde el equipo se medirá con Colombia, Grecia y Japón por el Grupo C.
"Costa de Marfil no ha hecho eso antes y una vez que se está en los octavos de final, hay una sensación de que todo es posible", destacó.
La selección africana tiene más oportunidades de avanzar de las que tuvo en sus dos apariciones mundialistas anteriores. En Alemania 2006 fue eliminada tras perder sus primeros dos partidos, ante Argentina y Holanda, antes de vencer a Serbia.
En Sudáfrica 2010 empató con Portugal, perdió ante Brasil y derrotó a Corea del Norte, pero los cuatro puntos obtenidos no fueron suficientes para avanzar.
Sus decepciones en la Copa Africana hicieron que el equipo se gane la reputación de no reaccionar adecuadamente ante situaciones de presión.
Costa de Marfil suele mostrar un desempeño regular en los primeros partidos para luego ser eliminada en las rondas finales. En las últimos cinco ediciones del torneo continental, perdió la final por penales en dos oportunidades.
Pero las modestas ambiciones del equipo en Brasil y la ausencia de presión por ser favorito pueden convertirse en una exitosa despedida para Drogba y una buena carta de presentación para jugadores como Serge Aurier y Bony.
(Traducido por Daniela Desantis, editado por Javier Leira)