BELO HORIZONTE, Brasil, 28 Jun. (Reuters/EP)
Aunque Brasil ha sido su tradicional verdugo, los hinchas de Chile que teñían el sábado de rojo el estadio Mineirão para un partido de octavos de final del Mundial entre las selecciones soñaban con un "Mineirazo".
La expresión alude a la victoria aparentemente imposible de Uruguay contra Brasil en la final de 1950 en el estadio Maracanã de Río de Janeiro, que entró a la épica del fútbol con el nombre de "Maracanazo".
Brasil eliminó a Chile en las semifinal de 1962 y en octavos de final de 1998 y 2010.
Esta vez, sin embargo, Chile tiene una enorme confianza en la que fue descrita como la mejor selección de su historia. La "Roja" eliminó al campeón mundial España en la primera fase.
"Estamos con toda la confianza del mundo", dijo Cristian Rojo, un hincha chileno en las afueras del estadio en Belo Horizonte.
"Si la FIFA no coloca su mano negra, será un Mineirazo", añadió el ingeniero ambiental. "Tenemos miedo del arbitraje".
Los jugadores chilenos también expresaron su preocupación porque el arbitraje acabe favoreciendo a los dueños de casa, una hipótesis descartada por la Confederación Brasileña de Fútbol.
El técnico brasileño Luiz Felipe Scolari ha advertido que Chile será un rival difícil.
El equipo sudamericano ha mostrado un agresivo ataque y una presión permanente sobre sus rivales.
"Yo creo que va a ser una disputa fuerte, porque los dos equipos están bien preparado", dijo Vladimir de Freitas, un analista de sistemas brasileño.
"Pero creo que Chile no tiene la fuerza en la camiseta que tiene Brasil", añadió, aludiendo a la historia del pentacampeón.