Actualizado 18/06/2014 18:57

MUNDIAL-Hinchas errantes ven los partidos donde puedan


CURITIBA, Brasil, 18 jun, 18 Jun. (Reuters/EP) -

- No todos los hinchas que viajaron a Brasil para la Copa del Mundo verán en el estadio a sus selecciones, ya que las largas distancias entre las sedes y el ambiente que se vive en muchas ciudades hizo que muchos aficionados optaran por vivir la fiesta del fútbol en las playas o en zonas de más interés turístico.

Algunos, después de haber hecho un largo viaje a Brasil, se conforman con ver los encuentros en los bares o en pantallas gigantes a cientos de kilómetros de los partidos o con ir a estadios donde no están jugando las selecciones de sus países.

El solo hecho de estar en la casa espiritual del fútbol durante el torneo parece ser suficiente para muchos hinchas.

"Cada partido es en una ciudad diferente, por lo que a veces es muy difícil llegar a los partidos", dijo a Reuters Farshid Hadifar, un hincha iraní que vive en Australia antes de que su equipo jugara esta semana ante Nigeria en Curitiba.

Hadifar verá el duelo de Irán contra Argentina en Belo Horizonte, pero no el partido de su país frente a Bosnia en Salvador.

"Tengo la intención de asistir al España-Chile en Río. Estaré ondeando la bandera australiana", dijo sonriendo. Australia está en el mismo grupo que el campeón del mundo España.

Una semana en Río, recorriendo zonas turísticas como el Corcovado o las playas de Copacabana, puede ser más atractivo que viajar largas distancias a Cuiabá o a la tranquila Curitiba, incluso si su país juega allí.

Guido Wigert, un empleado estatal de Zúrich, parecía un poco perdido el pasado domingo mientras caminaba alrededor del estadio de Curitiba con un pequeño grupo de amigos que llevaban camisetas de la selección Suiza.

Ellos buscaban la zona oficial de hinchas de la FIFA, ubicada en un parque a varios kilómetros de distancia del estadio, con la esperanza de ver a Suiza jugar ante Ecuador en la capital Brasilia, a más de 1.000 kilómetros de distancia.

"No veremos a Suiza jugar en vivo. (Pero) para mí eso no es muy importante. Es la atmósfera", sostuvo.

Wigert explicó que, al igual que un buen número de aficionados extranjeros, había decidido los detalles de su viaje en septiembre, antes del sorteo realizado en diciembre.

"Tenemos amigos en Sao Paulo y dijimos que no queríamos viajar largas distancias", sostuvo.