Actualizado 17/06/2010 00:40

MUNDIAL-Suiza sorprende a España, Copa aún carece goles

Por Barry Moody

JOHANNESBURGO (Reuters/EP) - La primera gran sorpresa de la Copa del Mundo fue protagonizada el miércoles por la selección de fútbol suiza, cuando derrotó por la cuenta mínima a España, uno de los favoritos del torneo y campeón europeo, en un intenso partido.

Una carga comandada por el jugador suizo Gelson Fernandes fue suficiente para cerrar el encuentro con un 1-0 en lo que está resultando un torneo lleno de emociones pero con pocas anotaciones.

En los primeros 16 encuentros de la Copa del Mundo se han anotado tan sólo 25 goles, un promedio de 1,56 anotaciones por partido, un resultado muy pobre comparado con el promedio más bajo en una copa de 2,21 anotaciones de Italia 1990.

Los suizos, que nunca habían derrotado a la talentosa escuadra española en los 18 encuentros previos, se puso arriba en el marcador en los primeros minutos de la segunda etapa y a partir de entonces resistió los furiosos embates del cuadro español.

Frustrados por su reiterada falta de precisión en el último toque, los españoles optaron por el ingreso de Fernando Torres, pero el delantero no se vio muy cómodo tras un largo período de ausencia debido a una lesión.

La derrota del miércoles sienta un mal precedente para los campeones de Europa, que tiene una larga tradición de fracasos en las Copas del Mundo. Su mejor participación en un campeonato mundial fue cuando alcanzaron el cuarto lugar en 1950.

En el inicio de la jornada del miércoles, Chile obtuvo su primera victoria en una Copa del Mundo después de casi 50 años, cuando derrotó a Honduras por 1-0 gracias a un gol de Jean Beausejour.

Este fue el primer triunfo de Chile en un Mundial desde que el país fue anfitrión en 1962. Desde entonces, la selección jugó 13 encuentros sin conocer la victoria.

Honduras inscribió su nombre en la historia de la Copa del Mundo al convocar de emergencia a Jerry Palacios para sustituir a un lesionado, pues es el tercer hermano de esta familia en la selección nacional del país centroamericano.

DIAS HISTORICOS PARA LOS ANFITRIONES

Pero la excitación en Sudáfrica estaba centrada en el último encuentro del miércoles, que enfrentaba a la selección local con Uruguay, en un día feriado en que se conmemoran las protestas estudiantiles de 1976 en Soweto que sentaron un precedente clave en la lucha contra la segregación racial.

Los Bafana Bafana, apodo con el que se conoce a la escuadra local, que hasta el año pasado carecían de la confianza de su público, son ahora fuente de orgullo nacional y autoconfianza en que puedan clasificar a segunda rondo después de que anotaran el primer gol del torneo en el partido que empataron a uno con México.

Hasta hace poco, los sudafricanos creían que sufrirían la vergüenza de ser el primer local en ser eliminado en la etapa de grupos.

Los locales están preparando una concertina de vuvuzelas desde Table Mountain hasta Soweto, corazón de las celebraciones históricas del miércoles, para ayudar a su equipo a derrotar a Uruguay, plantel que debutó con un flojo encuentro con Francia que terminó empatado sin goles.

"¡Queremos escuchar esas vuvuzelas!", dijo el entrenador de Sudáfrica Carlos Alberto Parreira, después de que la FIFA rechazara una serie de quejas para prohibir el uso de la ensordecedora trompeta plástica.

Sin embargo, el equipo anfitrión perdía al inicio del segundo tiempo por 1-0, tanto marcado del delantero estrella de Uruguay Diego Forlán.

Para aumentar el simbolismo histórico, el encuentro contra los uruguayos se disputará en el estadio Loftus Versfeld, que por años fue uno de los principales escenarios del rugby, deporte preferido de los afrikaners, la población blanca que comandaba el país, en una ciudad que fue el corazón de la segregación.

En un hecho que añadió algo de polémica al encuentro, el entrenador argentino, Diego Maradona, lanzó nuevos ataques contra Pelé y el presidente de la UEFA, el ex jugador francés Michel Platini.

"Pelé que se vuelva a un museo", dijo Maradona en la sala de conferencias del estadio Loftus Versfeld, en la capital sudafricana, respondiendo a las críticas del brasileño sobre su capacidad como entrenador.

"Sabemos todos cómo son los franceses y Platini es francés y se cree más que todo el mundo", añadió Maradona después de que el presidente de la UEFA dijera que este era mejor jugador que entrenador.