Actualizado 20/04/2010 02:17

POLO-EEUU busca imputar laboratorio muerte caballos

Por Jeremy Pelofsky

WASHINGTON (Reuters/EP) - Las autoridades estadounidenses dijeron el lunes que estaban buscando un mandamiento judicial contra una farmacia en Florida que incorrectamente mezcló medicamentos que causaron la muerte de 21 caballos de polo de un equipo venezolano hace un año.

Franck's Compounding Lab Inc y su presidente ejecutivo, Paul Franck, fueron acusados de mezclar inapropiadamente ingredientes farmacéuticos activos en fármacos para animales, práctica que el Departamento de Justicia y la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA, por su sigla en inglés) dijeron que era ilegal en la medicina veterinaria.

La FDA no prueba o revisa estos medicamentos y la agencia dijo que muchos de los productos que Franck's Compounding Lab fabricó eran copias ilegales de fármacos similares que habían sido aprobados por la FDA.

"Denunciamos que las prácticas en este caso contribuyeron a resultados fatales", dijo Tony West, fiscal general asistente para la división civil del Departamento de Justicia, refiriéndose a las muertes del año pasado.

El año pasado, la compañía admitió que había preparado la mezcla que causó la muerte a los caballos por orden de un veterinario.

Los caballos pertenecían al equipo de polo venezolano Lechuza Caracas y murieron en el Abierto de Estados Unidos en abril del 2009 horas después de recibir una dosis fatal de selenio en un suplemento vitamínico, de acuerdo con el veterinario estatal.

El Departamento de Justicia y la FDA pidieron a una corte que emitiera un mandamiento judicial permanente contra la compañía de Florida y su jefe ejecutivo, para detener la práctica de usar ingredientes activos al mezclar medicamentos para animales.

La compañía dijo que respondería a las acciones judiciales y defendió sus operaciones, diciendo que eran "legales y médicamente vitales".

"Nuestros procedimientos de control de calidad son fuertes y cumplen por completo con los requerimientos regulatorios", afirmó la compañía.

Los caballos que murieron fueron valuados en hasta 100.000 dólares cada uno y pertenecían al dueño de Lechuza Caracas, Víctor Vargas, un millonario empresario y presidente de la Asociación Bancaria de Venezuela.