MADRID, 2 Jul. (EUROPA PRESS) -
La Real Sociedad ha puesto fin a su nefasta racha de resultados después de remontar este jueves ante el RCD Espanyol (2-1), que se acerca inexorablemente a Segunda, en una trigésima tercera jornada de LaLiga Santander en la que un doblete de Rubén García ha ofrecido a Osasuna su tercer triunfo consecutivo ante un Eibar (0-2) que no puede alejar el fantasma del descenso.
Después de cinco partidos -un empate y cuatro derrotas-, los de Imanol Alguacil consiguen así su primera victoria desde la reanudación del campeonato tras el parón por la pandemia de coronavirus, que les permite volver a soñar con estar en competiciones europeas la próxima temporada; ahora, son séptimos -plaza de acceso a la previa de la Europa League- con 50 puntos, dos más que el Athletic Club.
Por contra, el conjunto de Rufete tiene cada vez más complicado dar la campanada, con solo cinco jornadas por delante. Colistas con 24 unidades, a diez de la zona de permanencia que marca el Celta, los blanquiazules necesitarán casi un milagro para permanecer la próxima temporada en Primera.
En un vacío Reale Arena, Willian José inauguró el marcador, pero el colegiado anuló el tanto al determinar que estaba en fuera de juego. Casi sin tiempo para asimilarlo, David López respondió con un remate de cabeza con el que superó a Moyá para adelantar al equipo catalán (min.9). Diego Llorente, con un remate al larguero, y de nuevo Willian José, que disparó fuera, pudieron igualar el duelo para los donostiarras, que despidieron la primera mitad con la lesión de Januzaj.
El delantero brasileño, sin embargo, no falló en la reanudación del choque, después de que Mikel Merino pusiese un buen centro para Oyarzabal, que cedió para que este mandase el esférico al fondo de las mallas (min.55). Ya en el 83, Isak cazó un balón muerto en el área y anotó para confirmar la remontada y poner al Espanyol con un pie y medio en LaLiga SmartBank.
RUBÉN GARCÍA ALARGA LA INCERTIDUMBRE DEL EIBAR
En Ipurua, el Eibar cayó en la visita de Osasuna (0-2), que con dos goles de Rubén García ató casi de manera matemática la permanencia. Los de José Luis Mendilibar, en cambio, todavía deberán luchar para salvarse, con los puestos de descenso seis puntos por debajo de sus 35.
Apenas habían transcurrido cinco minutos desde el pitido inicial cuando una jugada a balón parado permitió adelantarse a los navarros; Rubén García, con un lanzamiento de rosca perfecto, clavó la falta directa en la escuadra de Dmitrovic, que no pudo hacer nada para evitarlo.
Al cuarto de hora, Pedro León tuvo la ocasión perfecta para el empate al recuperar un balón tras una mala cesión de David García a Herrera, pero el murciano, ya escorado y con el portero superado, se desestabilizó cuando fue a chutar y mandó el disparo fuera. El guardameta del cuadro rojillo también desbarató la oportunidad más clara para el conjunto local en el 73', al sacar un cabezazo de Kike García.
Solo un minuto después de esa acción, llegó la sentencia de Osasuna; Roberto Torres puso un pase perfecto para Marc Cardona, que esperó la llegada de un Rubén García que, de nuevo, mandó el balón al fondo de las mallas (min.73).