Actualizado 28/07/2009 20:23

RUGBY-Inglaterra, sede Mundial 2015 y Japón en 2019

DUBLIN, jul 28 - Inglaterra fue elegida como sede de la Copa Mundial de Rugby del 2015, en tanto Japón se encargará de organizar la edición del 2019, anunció el martes la entidad que rige ese deporte, la International Rugby Board (IRB).

Japón, que había perdido la oportunidad a manos de Nueva Zelanda en el proceso de selección para el torneo del 2011, e Inglaterra, que ya albergó el evento en 1991, fueron elegidos por sobre las candidaturas de Sudáfrica e Italia durante un encuentro de la IRB en Dublín.

La polémica de decisiones anteriores causada por los presuntos votos "negociados" se evitó cuando los 26 miembros del Consejo de la IRB valoraron las recomendaciones de la Rugby World Cup Limited (RWCL), entidad encargada de la organización del evento, y resolvieron por 16 a 10 la votación.

El Comité de la RWCL, al cual se le solicitó un análisis de todas las candidaturas, señaló el mes pasado que Inglaterra maximizaría las posibilidades comerciales de la Copa Mundial y que una primera edición en Asia del torneo contribuiría al desarrollo del deporte en esa región.

"Necesitamos dos cosas importantes. Lo primero es el dinero para el deporte y luego es su rol alrededor del mundo", afirmó el presidente de la IRB, Bernard Lapasset, al anunciar los ganadores.

Inglaterra no había logrado ser sede en el 2007, cuando Francia se ganó los votos de Gales, Escocia e Irlanda mediante la promesa de partidos internacionales.

ESTADIOS DE FUTBOL

Organizadores no querían que la Copa Mundial incluyera sedes de partidos compartidas con países vecinos, algo común en torneos previos, e Inglaterra ya acordó utilizar en el evento los icónicos estadios de fútbol Wembley, Old Trafford y Anfield.

Japón, cuya selección nacional logró apenas un triunfo en seis participaciones en la Copa Mundial, sacó ventaja a sus competidores por contar con una excelente infraestructura que es el legado del Mundial de fútbol que organizó junto a Corea del Sur en el 2002.

El ambicioso país asiático pretende además volver a recibir el máximo evento del fútbol internacional en el 2018 o el 2022, en tanto Tokio es una de las ciudades candidatas para los Juegos Olímpicos del 2016.

La IRB exige un presupuesto de 80 millones de libras esterlinas (132,3 millones de dólares) para la organización de la Copa del 2015 y de 96 millones para el 2019.

La entidad también se apropia de los beneficios generados por el certamen. El anfitrión sólo conserva las ganancias por venta de boletos.

Sin embargo, en un informe llevado a cabo recientemente por la firma Deloitte, se calculó que la Copa Mundial podría generar más de 2.000 millones de libras esterlinas en beneficios económicos para la nación organizadora.