Publicado 08/05/2015 03:12

Acreedores congelan cuentas bancarias de Argentina en Bélgica

Fondos buitre, juez Thomas Griesa
REUTERS


BUENOS AIRES, 8 May. (Reuters/EP) -

Acreedores que ganaron un juicio contra Argentina por su deuda en 'default' (suspensión de pagos) consiguieron congelar dos cuentas bancarias del Gobierno del país sudamericano en Bélgica para forzarlo a pagar sus bonos incumplidos, según ha confirmado este jueves a la agencia Reuters una fuente familiarizada con la situación.

Las cuentas fueron congeladas por orden de una corte belga, aunque no se sabe cuánto dinero contienen ni si finalmente podrán ser embargadas, en un nuevo giro de la larga batalla legal sobre títulos que quedaron impagos en la masiva cesación de pagos de Argentina por 100.000 millones de dólares en 2002.

Argentina reestructuró la mayor parte de esa deuda en 2005 y 2010 con fuertes quitas, pero un grupo de fondos de inversión --conocidos en el país sudamericano como 'fondos buite'-- demandó al país en Estados Unidos para reclamar mejores términos de compensación.

Argentina se niega a pagarles, por lo que los fondos están rastreando por el mundo activos del país que puedan embargar, para cumplir con una orden de la justicia estadounidense que les reconoce el derecho a cobrar la totalidad de esos títulos que compraron a precios bajos tras el 'default' de 2002.

"El Gobierno argentino se niega rotundamente a sentarse a negociar con acreedores", ha denunciado en un comunicado NML Ltd, una subsidiaria de Elliott Management, el fondo de cobertura que lidera la demanda contra la nación austral.

"Ante la falta de una salida negociada, nuestro recurso incluye localizar y congelar activos argentinos donde sea que los encontremos. Argentina no debería sorprenderse de que su negativa a negociar lleve a sus acreedores a buscar hacer cumplir sus derechos en la justicia", ha añadido a través de un comunicado.

Argentina fue forzada a caer en un cese parcial de pagos en julio del año pasado, después de que un juez estadounidense prohibiese al país cumplir con vencimientos de su deuda reestructurada hasta que no alcanzase un acuerdo con los acreedores impagos, conocidos como 'holdouts'.