Actualizado 21/06/2014 00:57

ACTUALIZA 4-Argentina está dispuesta a negociar con todos sus acreedores: presidenta Fernández

* Representantes argentinos buscan dialogar en Nueva York

* Presidenta usa inusual tono moderado en discurso

* Argentina pretende evitar nueva cesación de pagos

(Agrega nueva orden de juez Griesa)

Por Jorge Otaola

BUENOS AIRES, 20 jun, 21 Jun. (Reuters/EP) -

- La presidenta argentina, Cristina Fernández, dijo el viernes que su Gobierno está dispuesto a negociar con todos sus acreedores, incluidos fondos en Estados Unidos que no reestructuraron su deuda, pero en las mismas condiciones que aquellos que aceptaron canjes después de una masiva cesación de pagos en 2001.

Durante un acto público, la mandataria insistió en que el país sudamericano quiere honrar sus obligaciones financieras con el 100 por ciento de los acreedores.

Argentina necesita encontrar rápido una solución luego de que la Corte Suprema de Estados Unidos no accedió a escuchar una apelación de un fallo anterior, lo que en la práctica le obliga a pagar a los tenedores de deuda que no participaron en la reestructuración, algo a lo que hasta ahora se ha resistido.

Fernández dijo que se le pedirá al juez de distrito de Nueva York Thomas Griesa, quien lleva el caso desde hace más de una década, que "genere condiciones de negociación justas".

Se busca "llegar a un acuerdo que sea beneficioso e igualitario para el 100 por ciento de los acreedores. Porque hay normas que cumplir y leyes que respetar aquí y también en el país donde se dictó la sentencia", sostuvo durante la celebración del "Día de la Bandera", en un tono moderado que contrastó con una dura retórica anterior.

El 30 de junio Argentina debe realizar en Estados Unidos un pago de su deuda reestructurada. Pero si no llega a un acuerdo, el dinero sería embargado por la justicia para cumplir con pagos por 1.330 millones de dólares a los fondos de cobertura que mantienen deuda no reestructurada.

Ese escenario implicaría técnicamente una nueva cesación de pagos al incumplir los compromisos con los acreedores que aceptaron los canjes de deuda en el 2005 y el 2010, después de la cesación de pagos de unos 100.000 millones de dólares en 2001-2002.

Los canjes fueron aceptados por el 92,4 por ciento de los acreedores.

"También queremos cumplir con los que no ingresaron" a la reestructuración, dijo Fernández. "Argentina, como siempre, va a estar dispuesta a dialogar".

Argentina ha hecho este año un esfuerzo para cerrar conflictos en el extranjero con miras a regresar a los mercados internacionales de deuda, de los que ha estado marginada desde la cesación de pagos. El Gobierno de Fernández llegó a acuerdos con la petrolera española Repsol y los acreedores del Club del París.

Tras el discurso de Fernández, las acciones de empresas argentinas en Nueva York subieron un 7,29 por ciento, según un índice de Bank of New York Mellon. Los mercados argentinos estaban cerrados el viernes por un feriado.

SEMANA DE DECISIONES

Abogados del país sudamericano participaron el miércoles de una audiencia ante Griesa, luego de que una corte de apelaciones de Estados Unidos retiró una medida cautelar que permitía temporalmente a Argentina evitar el millonario pago a los llamados "holdout", lo que dejó las puertas abiertas a embargos.

Argentina dijo entonces que el levantamiento de esa medida cautelar imposibilitaría el próximo pago a sus acreedores de deuda reestructurada en Nueva York.

El ministro de Economía argentino, Axel Kicillof, lanzó el martes la idea de intercambiar bonos que se rigen por la ley de Nueva York para la jurisdicción local como una forma de salir del aprieto legal.

Pero Griesa emitió el viernes una orden en contra de cualquier posibilidad de canje.

"La propuesta del Ministro de Economía se encuentra en violación de las resoluciones y los procedimientos actualmente en vigor en el Distrito Sur de Nueva York, y la República de Argentina no puede llevar a cabo la propuesta", dijo la orden.

La idea del canje era inviable para los mercados, ya que muchos de los fondos de inversión con bonos reestructurados tienen prohibido en sus estatutos la propiedad de la deuda en jurisdicciones extranjeras.

Los tenedores de deuda impaga son liderados por NML Capital Ltd., una unidad de Elliott Management Corp., del multimillonario Paul Singer, y por Aurelius Capital Management, presidida por Mark Brodsky.

El Gobierno argentino dijo que si cumple con el pago a los acreedores que no aceptaron las reestructuraciones permitiría reclamos similares por 15.000 millones de dólares, un monto que asegura que no puede pagar.

El presidente del vecino Uruguay, José Mujica, dijo que la crisis que atraviesa Argentina por su deuda soberana impaga es un problema que deben asumir todos los países del bloque comercial del Mercosur, por lo que propuso una reunión entre sus miembros.