Actualizado 28/05/2014 23:09

ACTUALIZA 3-Barrick logra acuerdo inicial con comunidades indígenas por polémico proyecto Pascua-Lama

* Pacto podría incluir eventual "royalty indígena"

* Empresa interesada en retomar desarrollo de iniciativa

* Ministra considera apresurado hablar de regalía especial

(Agrega comentario de ministra de minería, empresa)

Por Fabián Andrés Cambero

SANTIAGO, 28 mayo, 28 May. (Reuters/EP) -

- La minera canadiense Barrick Gold logró un acuerdo inicial con comunidades indígenas en Chile mientras mantiene sus planes de obtener los permisos para el desarrollo del polémico proyecto aurífero Pascua-Lama.

El proyecto de Barrick permanece detenido en Chile por órdenes de la justicia y el regulador medioambiental hasta que cumpla con la construcción de un sistema para el manejo de aguas que estaba contemplado en su permiso ambiental y que aún no ha realizado.

Lorenzo Soto, abogado de comunidades diaguitas del norteño valle del Huasco, colindante al proyecto, dijo a Reuters que el pacto no significa un acuerdo definitivo o comenzar un diálogo, sino la fase inicial de un proceso para acercar a las partes.

"Es un proceso histórico, inédito en la historia minera de Chile", dijo el abogado, que representa a 15 comunidades del área.

Pobladores de la zona se han opuesto al proyecto denunciando que la construcción de la mina afecta la disponibilidad de agua y que la empresa no realizó apropiadamente consultas a las comunidades indígenas como establece una resolución de la Organización Internacional del Trabajo (OIT).

Durante los seis meses de vigencia del acuerdo, la empresa entregará información a las comunidades, que podrán corroborarla con expertos y, de resultar positivo, se pasaría a una fase de diálogo por unos dos años.

Entre las posibilidades de solución está el establecimiento de una regalía especial -o "royalty indígena"- a la comunidad de un porcentaje sobre las ventas de la compañía, como se aplica en otros países, explicó Soto.

El convenio no implica un pago directo a las comunidades por parte de Barrick, aunque la firma costeará los estudios que éstas encarguen.

"Este no es el catalizador para que la compañía vaya e inicie la construcción. Esta es una de las distintas cosas que tiene que hacer", dijo Josh Wolfson, analista de Dundee Capital Markets en Toronto.

El experto dijo que todavía la empresa debe resolver cómo financiar el resto del proyecto -que estima necesitará unos 4.000 millones de dólares adicionales- y determinar si es rentable con los actuales precios del mineral.

Barrick dijo que el acuerdo de intercambio de información y comunicación busca recobrar la confianza en la iniciativa y alinearse al convenio del la OIT.

"Pese a que Pascua-Lama hoy está paralizado, nuestro objetivo es obtener los permisos para retomar la construcción. Sin embargo, esta vez lo queremos hacer de la mano de las comunidades", dijo Eduardo Flores, vicepresidente senior de Pascua-Lama, en un comunicado.

SE EXTENDERIAN PLAZOS

La ministra chilena de Minería, Aurora Williams, calificó de positivo el acercamiento entre las partes, pero afirmó desconocer los detalles del acuerdo.

"Nos parece que este es un paso importante, naturalmente, pero no es el único que se debe dar. Esto tiene que terminar efectivamente con la participación de las comunidades en estos proyectos pero por otro lado resolver todos los aspectos técnicos", dijo a periodistas.

Sin embargo, la funcionaria se mostró contraria a debatir en lo inmediato la posibilidad de un royalty indígena.

"Creemos que todavía nos falta un poco. Creo que es un tema hacia el cual hay que ir caminando, no nos cerramos a ello, pero yo creo que hoy día no es el tema prioritario", acotó.

Si el acuerdo sigue en pie, Barrick sólo podría retomar la construcción del proyecto luego de que culmine las obras de manejo de aguas y cuando concluya la fase de diálogo, que podría contar con observadores nacionales e internacionales.

"La ejecución del proyecto es incompatible con el análisis previo de todas las materias y consideraciones que hemos señalado, por lo tanto el proyecto tendría que seguir detenido", apuntó Soto.

El abogado detalló que el tiempo que se tarde en realizar los estudios es variable por lo que podría extenderse incluso más allá de los dos años previstos tentativamente en la auditoría al proyecto.

El convenio no es vinculante por lo que ambas partes se pueden retirar del diálogo y no bloquea la posibilidad de las comunidades a nuevas acciones.

"Las comunidades no han renunciado a ninguna acción judicial, se pueden retirar cuando quieran y no puede entenderse como renuncia a derechos a nivel nacional o internacional para los pueblos diaguitas", acotó Soto.

A la fecha, Barrick ha invertido más de 5.000 millones de dólares en el proyecto, enclavado en la Cordillera de los Andes entre Argentina y Chile.

La compañía también ha puesto el proyecto en espera por un análisis de costos.