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Por Michelle Martin
BERLIN, 25 feb, 25 Feb. (Reuters/EP) -
- El comercio exterior impulsó la expansión de Alemania en el cuarto trimestre, mientras que la demanda interna, que fue un motor clave del crecimiento durante el resto del año, significó un lastre, mostraron el martes datos de la Oficina Federal de Estadísticas.
Los datos desestacionalizados confirmaron una estimación anticipada que reveló que el Producto Interno Bruto (PIB) alemán aumentó un 0,4 por ciento en el trimestre de octubre a diciembre, frente a un alza de un 0,3 por ciento en los tres meses previos.
Un desglose detallado mostró que el comercio exterior, que fue débil durante gran parte del 2013, añadió 1,1 puntos porcentuales al PIB en el cuarto trimestre. La demanda interna restó 0,7 puntos porcentuales al crecimiento.
La oficina de estadísticas dijo que la economía doméstica envió "señales mixtas". La inversión de capital mejoró significativamente, grandes reducciones de inventarios frenaron el crecimiento y el gasto público se estancó, mientras que el consumo privado disminuyó.
Recientes indicadores sobre confianza han sido positivos, aunque otros datos han resultado más débiles, generando dudas sobre la fortaleza del desempeño actual de la economía.
Pero economistas esperan que la demanda interna cobre fuerza este año y Berlín cuenta con ello para impulsar una prevista expansión de un 1,8 por ciento, aunque se espera que el comercio exterior debilite el crecimiento.
"La alta seguridad laboral y los crecientes ingresos, así como una inflación muy baja han estado impulsando la confianza del consumidor a máximos récord últimamente y esto debería traducirse en un crecimiento del gasto familiar más fuerte en el 2014", dijo Christian Schulz del Berenberg Bank.
"La fuerte caída de los inventarios podría incluso alentar una recuperación en el primer trimestre del 2014 si se reponen los inventarios", agregó.
Datos mostraron la semana pasada que los salarios reales en Alemania cayeron en el 2013 por primera vez en cuatro años, pero Holger Sandte, economista de Nordea, dijo que el ingreso real seguramente se desarrollaría más positivamente este año por lo que había muchas probabilidades de que el consumo privado pudiera repuntar.