Actualizado 02/07/2015 06:28

ANÁLISIS-Cosecha récord de granos en EEUU no generará bonanza en exportaciones este año

Por Christine Stebbins y Karl Plume

CHICAGO, 20 oct, 20 Oct. (Reuters/EP) -

- La mayor cosecha de granos de Estados Unidos en la historia ha presionado los precios a mínimos de cuatro años, lo que usualmente significa una bonanza en las ventas para el mayor exportador mundial de alimentos. Pero esto no sucederá este año.

Rivales tradicionales y agresivos nuevos competidores con abundantes cosechas, como Ucrania y Rusia, están aprovechando la fortaleza del dólar para obtener una mayor participación en un mercado que se está reduciendo al tiempo que los mismos importadores elevan la producción.

Además, el obstruido sistema de transporte local ha disparado los costos de traslado por río y tren, encareciendo el envío de grandes volúmenes de granos a las terminales de exportación.

Esto está reduciendo el monto que reciben los agricultores de los exportadores, alentando a muchos a reservar sus cosechas con la esperanza de que las existencias de los rivales de Estados Unidos se agoten en algún momento y den paso a una recuperación en las ofertas por sus granos.

"Vamos a recolectar esta cosecha, separarla y nuestras exportaciones van a repuntar", dijo Jerry Mohr, presidente de la asociación de productores de maíz de Iowa, que cultiva 1.100 acres (unas 445 hectáreas) de maíz y granos cerca de Davenport, Iowa.

Mohr traslada sus cosechas a un elevador cercano en el Río Misisipi, donde son cargadas en barcazas para ser enviadas a instalaciones de exportación en la costa estadounidense del Golfo de México. El funcionario espera que los precios ahí se debiliten en las próximas semanas cuando una gigantesca cosecha obstruya los sistemas de transporte.

"Va a haber mucho maíz y ningún lugar para llevarlo", dijo.

La congestión de vías ferroviarias causada por la creciente demanda de transporte de petróleo por tren disparó las tasas desde entre 200 y 300 dólares por cada vagón de 100 toneladas hace poco mas de un año, a cerca de 5.000 dólares esta temporada de cosecha. Los costos de las barcazas para los embarques en época de cosecha tocaron récord en algunas áreas este año.

"Los agricultores no han pagado ese precio antes", dijo el analista Stephen Nicholson de Rabobank, un importante prestamista agrícola.

A medida que se reduce la cuota de Estados Unidos en el mercado exportador global, analistas esperan que la resultante acumulación de suministros impulse la siembra de soja en Estados Unidos y disminuya la de maíz y trigo la próxima temporada.

Esto se sumará al cambio en los patrones de comercio mundial de granos, donde la región del Mar Negro seguirá siendo un agresivo participante mundial en la industria de granos.

Será difícil que el mercado local absorba los abundantes volúmenes de granos que se acumularán, lo que presionará fuertemente a la economía agrícola, y a todo, desde el valor de las tierras de labranza hasta las ventas de maquinaria agrícola.

Se espera que las exportaciones de maíz, el mayor cultivo comercial de Estados Unidos, caigan un 9 por ciento esta temporada a 1.750 millones de bushels (unas 44 millones de toneladas), según el Departamento de Agricultura de ese país. Las grandes cosechas fuera del país reducirán las importaciones totales en un 8 por ciento, a 4.400 millones de bushels.

Los precios del maíz en las terminales exportadoras de la costa estadounidense del Golfo de México alcanzan ahora casi 12 dólares por tonelada más que en Ucrania y el gran puerto Paranagua de Brasil, y 17 dólares más que las exportaciones de Argentina, según datos de Reuters. Los costos de transporte por mar desde Estados Unidos no son lo suficiente baratos como para contrarrestar esas diferencias de precios.

Varios años de altos precios, impulsados por la creciente demanda de China y una expansión en la industria de biocombustibles, alentaron a los agricultores a nivel global a sembrar más cosechas e invertir en la infraestructura para trasladarlas.

Competidores como Brasil, Ucrania y otros productores del Mar Negro empezarán a quedarse sin suministros de maíz para febrero o marzo, dando a los participantes estadounidenses la oportunidad de volver al juego, dijeron analistas de granos.

En tanto, se estima que las exportaciones combinadas de maíz, soja y trigo de Estados Unidos representen apenas un 30 por ciento del comercio mundial esta temporada, la cuota de mercado más baja para Estados Unidos que se registre en un año sin sequía.