BUENOS AIRES, 23 Oct. (EUROPA PRESS) -
El Gobierno argentino anunció su intención de reabrir el canje de deuda incumplida en 2005 para los bonos por 20.000 millones de dólares que no ingresaron en esa oportunidad y que, en ese marco, en los próximos días enviará al Congreso un proyecto para suspender la denominada 'Ley Cerrojo', que impide la reapertura para un nuevo canje.
Así lo anunció el ministro de Economía argentino, Amado Boudou, quien aseguró que no sólo iban a poner fin a esa ley sino que la van a suspender definitivamente para permitir que Argentina aproveche el buen momento de los mercados financieros internacionales y dé solución al "mayor porcentaje posible la situación de estos tenedores de títulos que habían quedado fuera del canje anterior".
El ministro argentino también informó de que habían encargado a los bancos Barclays, Citi y Deutsche avanzar en negociaciones para una oferta a los inversores que no aceptaron el canje de deuda en 2005. "Hemos convocado al grupo de bancos liderado por Barclays pero que también conforman el Citibank y el Deutsche Bank a firmar una carta mandato que va a servir para definir finalmente la letra chica, los puntos del proceso de reestructuración", dijo Boudou en rueda de prensa.
El ministro adelantó que a partir de mañana se comenzará a "tramitar" ante los organismos regulatorios internacionales, como la SEC estadounidense, los prospectos correspondientes para llevar adelante la operación de canje, en informaciones de los medios locales recogidas por Europa Press.
Dicha maniobra económica es entendida como un paso indispensable para que Argentina vuelva a los mercados globales de crédito con la emisión de un bono, lo que ayudaría al país a enfrentar pesados vencimientos previstos para 2010. Esta nueva reestructuración implicaría un descuento mayor al 65 por ciento, como el que enfrentaron los tenedores de bonos que aceptaron el canje en 2005, y quienes decidan ingresar al canje deberán suscribir a una nueva emisión de bonos, agregó Boudou.